Su proximidad al valle del Ebro, a los Sotos de Alfaro, y las peculiares características arquitectónicas de la Colegiata de San Miguel, con más de 2.000 metros cuadrados de tejado, han propiciado desde mediados de los años 80 el aumento de la colonia de cigüeñas de este edificio, que en lo que va de siglo no ha bajado de los 100 nidos, convirtiéndose en la mayor colonia urbana sobre un solo asentamiento de todo el mundo.
Este creciente número de nidos ha obligado a tomar medidas de cara a evitar problemas de conservación en los tejados de la Colegiata, así como cualquier riesgo de caída a la vía pública. Para tratar de preservar esta importante colonia de cigüeñas y, al mismo tiempo, garantizar la protección del patrimonio de interés histórico artístico que representa el edificio se han llevado a cabo en los últimos años diversas actuaciones de reordenación y retirada de nidos, y de instalación de parrillas, mallas y otras infraestructuras disuasorias para las aves. Además, durante todo este tiempo, ha contado con una subvención anual de la administración medioambiental riojana para el mantenimiento y limpieza de los nidos de cigüeña de su tejado.
Representantes de la Dirección General de Medio Natural y de la Dirección General de Cultura del Gobierno de La Rioja, así como del Ayuntamiento de Alfaro y de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, mantuvieron recientemente un encuentro con el objetivo de continuar y dar un nuevo impulso a las líneas básicas de trabajo iniciadas años atrás, y de esta reunión surgió la necesidad de elaborar un documento que recogiera las principales actuaciones a ejecutar en los próximos años.
El nuevo Plan de Manejo de la Cigüeña Blanca en la Colegia de San Miguel de Alfaro 2013-2016 que contempla la reubicación de nidos para garantizar el mantenimiento de la colonia de cigüeñas, sin que el edificio se vea afectado.
El conjunto de actuaciones del plan supondrá una inversión de 99.590 euros en sus tres años de vigencia. Este primer año,los trabajos se van a centrar en lo más urgente que es la retirada de nidos de la torre de la izquierda, que es la que cuenta con más nidos en la actualidad; también en esta torre se van a retirar mallas viejas en mal estado y se van a colocar nuevos dispositivos para impedir la instalación de nidos.
De 100 a 89 nidos sobre la Colegiata
Partiendo de unos estudios previos, el plan se marca el objetivo de reducir a 89 el número de nidos sobre la Colegiata, en lugar de los 100 que existen en la actualidad, reubicando además todos los nidos que se asienten directamente sobre teja, asentando los nidos en las estructuras metálicas (parrillas) colocadas a tal fin y tendiendo a dispersar el resto de la población (los 11 nidos restantes) a los postes situados en los Sotos de Alfaro o en el entorno de La Molineta o Tambarría.
A grandes rasgos, los principales problemas que plantea la existencia de nidos en la Colegiata se dan en tres situaciones: cuando se trata de nidos que dan a la vía pública, cuando el nido se coloca sobre algún elemento inestable que no pueda soportar el peso y cuando se apoyan directamente sobre las tejas por el riesgo de filtraciones y humedades que acarrean al retener las aguas de lluvia. Para evitar esto último se colocan las llamadas parrillas, unas estructuras metálicas que impiden que el nido apoye directamente sobre el tejado.
En la actualidad, los tejados de la Colegiata de San Miguel cuentan con 53 parrillas, aunque de los 100 nidos que existen tan sólo 28 nidos están ubicados sobre alguna de ellas.
En este contexto, durante los tres años que dura el plan se van a reubicar 45 nidos para conseguir que toda la colonia de cigüeñas de la Colegiata esté asentada en lugares apropiados. Un total de 33 nidos mal ubicados se retirarán y se colocarán en parrillas, tanto en las 25 que ya existen y que se encuentran vacías como en otras 8 nuevas parrillas que está previsto colocar. Otro nido se colocará en los pináculos y, finalmente, 11 nidos serán retirados del edificio y se trasladarán a los postes actualmente vacíos en los parajes de Tambarría, los Sotos y La Molineta, colocándolos a modo de nidos señuelo para potenciar el asentamiento de cigüeñas en esas zonas.
Junto a la reubicación de los nidos, el plan contempla diversas actuaciones para impedir el asentamiento de nuevos nidos en las repisas y ventanales de las torres, en los pináculos y en otros puntos mediante la instalación de mallas y pastores eléctricos.
Las actuaciones del plan se complementarán con las labores de mantenimiento y limpieza de nidos que realiza anualmente Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño en la Colegiata con el apoyo económico del Gobierno de La Rioja a través de la línea de subvenciones que Medio Natural otorga desde 1994 y que ha contribuido al mantenimiento de más de 3.400 nidos de cigüeña común en edificios privados durante los últimos 20 años. Estas labores incluyen la limpieza de los tejados y la descarga de nidos para que ninguno resulte muy voluminoso y pesado, tal y como establece el Plan de Manejo.