La Comunidad ha construido dos nuevas charcas en la zona norte del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama para favorecer la instalación de poblaciones de anfibios y galápagos europeos y leprosos, especies autóctonas. Se trata de dos láminas de agua de unos 100 metros cuadrados y un metro de profundidad que constituyen espacios idóneos para la habitación de estas especies.
El Gobierno regional desarrolla un intenso trabajo de mejora de los ecosistemas del Parque para proteger e impulsar su biodiversidad. Los técnicos han inventariado cerca de 250 charcas y complejos lagunares sobre los que realizan labores de mantenimiento y mejora para potenciar las poblaciones de anfibios.
El Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama cuenta actualmente con numerosas especies de anfibios y reptiles: sapo común, sapo partero, sapillo pintojo, sapo de espuelas, sapo corredor, rana común, gallipato o rana de San Antonio, entre los primeros; y galápago leproso, galápago europeo o culebra de agua, entre los segundos.
Las dos charcas construidas por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio han sido valladas para evitar los daños asociados a la entrada de grandes mamíferos. Además, se han señalizado con el fin de informar y sensibilizar a los usuarios del Parque sobre las actuaciones realizadas, el proyecto y las especies presentes. También se ha acondicionado el entorno con vegetación autóctona que favorezca la colonización del espacio por parte de anfibios y reptiles.
Estos animales constituyen un grupo faunístico de gran valor ecológico, elementos clave en la cadena trófica y excelentes bioindicadores de la salud de los ecosistemas. Actúan como magníficos insecticidas naturales, controlando posibles plagas y minimizando la proliferación de enfermedades. En su piel presentan más de 300 sustancias de interés farmacológico, y participan en los procesos de dispersión y polinización de algunas especies de plantas. Toda esta información, así como las amenazas a las que se ven sometidos anfibios y reptiles, ha sido recogida en distinto material divulgativo para su distribución entre los centros escolares de la zona.
Recuperación de cauces y riberas
La Comunidad ha enriquecido desde el año 2007 cerca de 100 hectáreas de vegas y riberas de los cauces del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama con el propósito de restaurar y mejorar estos ecosistemas e impulsar la biodiversidad. La plantación de especies tales como alisos, fresnos, chopos, sauces, saúcos y tarays ha hecho posible no sólo la recuperación del espacio fluvial, sino que además ha permitido asegurar la regeneración natural de las riberas y ha contribuido a mejorar la calidad de las aguas. Así se explica el aumento de la población de nutrias en este entorno, una especie testigo por cuanto que su presencia sólo es posible en aguas especialmente limpias.
El Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama y su Entorno es un espacio natural de gran diversidad ambiental que se extiende desde la base de la sierra hasta la campiña de la depresión del Tajo siguiendo el curso de los ríos Guadarrama y el Aulencia, afluente del primero.
Los trabajos desarrollados por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio para la mejora de estos ecosistemas han incluido tratamientos selvícolas y de limpieza, plantaciones de ribera, estabilización de márgenes y taludes, eliminación de residuos en los 280 kilómetros de cauces o el control de especies exóticas invasoras.
Estas actuaciones se han complementado con la creación de una red de 37 estaciones de muestreo en colaboración con el Centro Superior de Investigaciones Científicas para llevar a cabo un seguimiento continuo sobre la calidad físico-química del agua.