Los vocablos ingleses poison y venom se traducen como "veneno" en español, pero en inglés tienen dos significados bien diferenciados. "Si lo muerdes y mueres es poison, pero si te muerde y mueres es venom", explica Ronald Jenner, un experto en la evolución del veneno, del Museo de Historia Natural de Londres.
La característica del venom es que se introduce a través de una herida; puede ser inyectado de diferentes maneras, por ejemplo con los dientes, con un aguijón, con las espinas o con las uñas. "El poison es diferente, no implica una herida. Puede ser absorbido en el flujo sanguíneo a través de la piel, por inhalación o por ingestión", aclara.
"El poison tiene moléculas químicas muy pequeñas que pueden pasar fácilmente a través de la piel. Las moléculas del venom son demasiado grandes para ser absorbidas, pero resultan igual de efectivas al ser inyectadas", agrega.
Sin embargo hay especies que pueden tener tanto poison como venom: "La cobra escupidora muerde a su presa con el fin de paralizarla y poder comérsela. Pero también escupe. Y si eso cae en tus ojos puede causarte ceguera y un dolor horrible. En este caso se trata de poison porque es absorbido y no inyectado a través de una herida".
Se ha inaugurado una exposición innovadora sobre el fascinante mundo del veneno, que resuelve esta y otras cuestiones. Veneno: mortal y curativo, del 10 de noviembre de 2017 al 13 de mayo de 2018 en el Museo de Historia Natural de Londres, permite conocer algunas de las criaturas más venenosas del mundo, cuyas sustancias tóxicas también pueden proporcionar fármacos para los humanos: desde la diabetes a la impotencia, los científicos intentan desvelar los secretos del veneno para combatir algunas de las afecciones más serias de nuestros tiempos.
Serpientes, arañas, avispas, escorpiones e incluso el ornitorrinco puede liberar veneno para defenderse. "Mucha gente relaciona el veneno con las serpientes, las arañas y los sitios exóticos. Y, aunque es cierto, hay que decir que el veneno realmente existe en el mundo natural y humano y en cualquier rincón del planeta. Quienes visiten la exposición se sorprenderán al descubrir que hay hormigas con venenos más letales que el de las cobras y que cuando comes calamares en realidad te estás comiendo un depredador venenoso", asegura Jenner.