La teoría de que la energía ha provocado la aparición del cambio climático sobre la Tierra, creada por dicho centro de investigación, explica el aumento de los desastres naturales con mayor exactitud que la teoría existente sobre el CO2.
Según su investigación, Reka descubrió que para controlar el clima del planeta, es necesario reorganizar campos electromagnéticos tecnogénicos (TEMF, por su sigla en inglés) para enviar energía cosmosolar a determinadas zonas del planeta. Los científicos creen que la redistribución de la energía cosmosolar apareció debido a la actividad industrial y causó cambios en la convección gravitacional, debilitó el campo magnético de la Tierra y fue una importante causa del aumento en los desastres naturales de los últimos 40 años.
El centro de investigación sugiere que la reorganización de los TEMF detendrá esta redistribución de la energía en el planeta, y restaurará su circulación natural. A su vez, esto llevará a la recuperación del campo magnético de la Tierra y reducirá la incidencia de desastres naturales.
Los científicos ucranianos proponen reorganizar los TEMF del planeta y liberarlo de regiones escasamente pobladas (bosques, campos, ríos y etc.); amplificar significativamente los TEMF en la región del Atlántico Sur poniendo en servicio una serie de emisores, rádares y satélites allí. Y controlar zonas de éxtasis de magnetosfera en los polos Norte y Sur manteniendo suficiente acceso a la energía cosmosolar allí.
Los científicos apuntan que el debilitado campo magnético de La Tierra continúa por la puesta en marcha de nuevos rádares, estaciones de retraducción, satélites, etc.