El sistema financiero tiene que integrar criterios climáticos
En un informe titulado "Riesgos y oportunidades en las inversiones financieras", la organización incluye un listado de nueve recomendaciones para incorporar la variable clima al sistema financiero y evitar los riesgos que, según dice, se derivan del calentamiento global.
"La regulación del cambio climático, los riesgos de transición y, en algunos casos, los impactos físicos, afectarán al valor de una porción significativa de estos activos y esto implica un gran riesgo para los propietarios con carteras expuestas a sectores fósiles", señalan los responsables del informe.
Además, citan un estudio del Instituto de Liderazgo Ambiental de la Universidad de Cambridge que afirma que aconseja tener en cuenta la percepción del cambio climático como "factor de riesgo agregado" en las inversiones y afirma que "los beneficios de una acción temprana conducen a tasas de rendimiento significativamente más altas a largo plazo, especialmente cuando se compara con el escenario de inacción".
Transición hacia una economía sostenible
Por ello, la organización subraya el papel del sistema financiero como "motor fundamental para acelerar la transición a una economía sostenible y de bajo carbono" y recomienda a los inversores y a las instituciones oficiales que participan en el mercado de activo que realicen un diagnóstico del impacto climático de sus inversiones, para comprobar "si su cartera de inversiones se encuentra alineada con los objetivos del Acuerdo de París".
Entre las recomendaciones se encuentran también las de definir el compromiso y estrategia de inversiones conforme al acuerdo internacional y comunicarlo a los share-holders (accionistas) y stake-holders (grupos de interés), así como crear una "estructura de gobernanza climática" en las junta de accionistas con responsabilidad específica para definir objetivos y medidas conforme a criterios climáticos y para involucrar a los inversores.
En este sentido, piden también "transparencia", para lo que aconsejan definir un tipo de informe público para la divulgación de información financiera relacionada con cuestiones climáticas.
Asimismo, invita a los actores del sistema financiero a que participen en las coaliciones de inversores por el clima y a que quienes tengan activos en empresas de combustibles fósiles y de altas emisiones "se involucren como accionistas" para incentivar un cambio en el modelo de negocio. Por último, señalan la importancia de colaborar y dialogar con los reguladores y legisladores para impulsar marcos regulatorios adecuados a las exigencias del Acuerdo de París.