- El tráfico rodado es responsable del 70-80% de la contaminación en la mayor parte de los municipios españoles.
- La organización ecologista pide a Medio Ambiente transparencia sobre las actuaciones en el caso de contaminación de los vehículos Volkswagen.
El día en que la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, acude a la cumbre del Clima de París y en el que la capital ha puesto en marcha en “Escenario 2” de su protocolo anticontaminación, Greenpeace exige al Gobierno que adopte medidas a largo plazo sobre el sector de la automoción que impidan que episodios de contaminación como el que vive Madrid estos días sean más habituales en el futuro.
Greenpeace recuerda que además de las emisiones de gases de efecto invernadero, entre el 70 y el 80 por cierto de la contaminación de las ciudades españolas tiene su origen en el tráfico rodado, principalmente coches, lo que ha llevado al Ayuntamiento de Madrid a activar su protocolo de contaminación en dos ocasiones en las últimas semanas.
En este sentido, la organización ecologista ha solicitado información al Ministerio de Industria y al de Medio Ambiente sobre las actuaciones emprendidas por los daños causados al medio ambiente por los vehículos afectados por el escándalo de Volkswagen y en especial en lo relativo a la Ley 34/2007 de calidad del aire y protección de la atmósfera. Además, ha requerido al Ministerio de Industria que informe de los vehículos Volkswagen matriculados en España desde 2009, informando de las ayudas recibidas por el Plan PIVE y el impuesto de matriculación abonado por cada uno de estos vehículos.
“No podemos permitirnos el lujo de mirar para otro lado mientras vemos cómo los efectos del cambio climático son cada vez más claros en el planeta y la contaminación afecta de forma tan severa a nuestra salud, porque ambas cosas son parte de un mismo problema: un modelo de transporte fuertemente derrochador de combustibles fósiles”, ha declarado Mariano González, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace.
La organización ecologista considera que no debería obviarse la parte de responsabilidad de Volkswagen en estos episodios de contaminación, así como en la contaminación general que sólo en España causa la muerte prematura de más de 30.000 personas (http://www.eea.europa.eu/publications/air-quality-in-europe-2015).
Países como Reino Unido o Alemania han puesto en marcha investigaciones para conocer el número de vehículos afectados y no solo de Volkswagen, sino también del resto de marcas, mientras que del Gobierno español se desconoce cualquier tipo de investigación para conocer los vehículos afectados, una situación que debería cambiar sin demora.