Protegerse del fuego
La conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural está impulsando la regulación de las medidas de protección frente al fuego de las viviendas situadas en entornos de interfaz urbano-forestal, en el marco de la campaña de prevención iniciada este verano.
De este modo, se conferirá mayor seguridad a los propietarios de las viviendas en este tipo de urbanizaciones, que podrán planificar la defensa de su casa, y se especificarán las zonas y los mínimos que se deberán cumplir para minimizar los riesgos.
Asimismo, en la actualidad la conselleria está realizando unas jornadas de concienciación de la necesidad de actuar en las zonas de interfaz urbano/forestal. Estas jornadas se organizan en los ayuntamientos que han mostrado interés en participar. En ellas asisten residentes, presidentes o administradores de urbanizaciones del término municipal en el que se da la charla, se les habla del riesgo que tienen, de la obligación y necesidad de acometer actuaciones que prevengan del aumento de riesgo que supone estar cerca de un terreno forestal sin tomar precauciones y se les explica cuáles son las actuaciones pertinentes para reducir el riesgo lo máximo posible.
Estas reuniones se llevan a cabo por la Conselleria (con la intervención de agentes medioambientales y personal adscrito al Plan de Vigilancia Contra Incendios Forestales del servicio prestado por VAERSA) y las diputaciones provinciales.
En el marco de los consejos en materia de prevención de incendios forestales emitidos dentro de la campaña #stopalfoc, la conselleria ha hecho públicas unas recomendaciones de seguridad en prevención de incendios forestales orientadas a las casas y urbanizaciones de interfaz urbano-forestal.
En cuanto a la vegetación, es conveniente evitar que las copas de los árboles se toquen entre ellas y también con el matorral de su alrededor; las ramas deben estar a más de tres metros de las salidas de humos; el tejado debe permanecer limpio de hojas, así como también las puertas, ventanas y fachadas y no se debe acumular material inflamable en estas áreas.
También se aconseja disponer de una reserva de agua, como una piscina, una balsa o unos aspersores.
Los depósitos de combustible han de ubicarse lejos de la vivienda y preferiblemente enterrados o protegidos. Las salidas de humos pueden tener una red matachispas. Los paelleros y barbacoas, es recomendable que tengan construido un techo y tres paredes laterales sobre un suelo no combustible.