El indicador, llamado Índice Estandarizado de Precipitación y Evapotranspiración (SPEI, en sus siglas en inglés), permite cuantificar de forma numérica la intensidad, magnitud y duración de la sequía, además de su extensión superficial, momento de inicio y final.
Sergio Vicente Serrano, investigador del CSIC en el Instituto Pirenaico de Ecología, desgrana las utilidades de este nuevo índice: “Por un lado, el análisis retrospectivo para estudiar el comportamiento de las sequías y sus tendencias y, por otro, el seguimiento de las sequías en tiempo real para la gestión del riesgo y la alerta temprana”.
El CSIC ha puesto la herramienta al servicio de la comunidad científica
“La respuesta a la carencia de humedad varía entre los distintos sistemas hidrológicos, como aguas subterráneas, ríos o reservas de embalses; y entre éstos y los diferentes sistemas biológicos, como cultivos y bosques; con diferencias muy marcadas en los
tiempos de respuesta”, explica Vicente. “Al poderse calcular en varias escalas temporales, el nuevo índice permite adaptarse a los tiempos de respuesta característicos de diferentes sistemas naturales y económicos, permitiendo determinar la resistencia de cada uno de ellos a la sequía”, concluye el investigador del CSIC.
“Hasta el momento, ningún índice tenía en cuenta el carácter multiescalar de la sequía y el efecto de la temperatura de forma conjunta”, añade. Esto permite tener en cuenta el efecto del calentamiento global y determinar en qué medida está afectando a la severidad de las sequías (incluyendo su duración, magnitud y frecuencia). De hecho, los investigadores trabajan ahora mismo en cuantificar de manera más exacta este efecto, para lo que están desarrollando otros indicadores.
Una herramienta global
Los investigadores han creado una herramienta informática a partir de la que se puede obtener, mediante series pluviométricas y termométricas, el resultado del índice para cualquier lugar del mundo. Además, el equipo ha generado y puesto a disposición de la comunidad científica internacional una base de datos del índice que, con una frecuencia mensual, cubre el conjunto del mundo entre 1901 y 2006. Gracias a sus propiedades multiescalares, sus potenciales aplicaciones son muy variadas, incluyendo campos como la climatología, la hidrología, la agronomía o el medioambiente. Ambas herramientas se pueden descargar a través del repositorio Digital.CSIC en http://digital.csic.es/handle/10261/10002 y http://digital.csic.es/handle/10261/23051.
Ambas aplicaciones permitirán analizar de forma global cómo afecta el proceso del calentamiento global a la severidad de las sequías, comprender los mecanismos de circulación atmosférica que las provocan y determinar cuantitativamente la vulnerabilidad y umbrales de sequías de los sistemas ecológicos, agrícolas e hidrológicos de todo el mundo.