Si usted es de los que pedía días más largos, sepa que el universo le ha escuchado. Nos regalará días de 25 horas y los de 24 pasarán a la historia. No es una cuestión de capricho. La realidad es que se trata de una evolución natural. De hecho, hace 300 millones de años, 22 horas definían un día, incluso hay registros de 19. Una medida que ha ido creciendo muy lentamente, hasta llegar a la jornada actual. Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad Técnica de Múnich (Alemania) afirma que ya vamos camino de 60 minutos extra y, además, se atreven a poner fecha.
¿La explicación científica? Para empezar, sabemos que el transcurso de un día se mide por el tiempo que necesita nuestro planeta para girar una vez sobre sí misma, alrededor de su eje (norte-sur). He ahí las horas de luz y las de oscuridad de cada una de nuestras jornadas. Precisamente porque esta rotación se ha ido ralentizando de forma gradual, el tiempo de cada día ha ido incrementando.
Gravitación de la luna
Según los expertos, son varios los factores que incitan a dicha desaceleración, tales como las fuerzas de gravitación que ejercen la luna y el sol, los movimientos de los materiales en el interior de la Tierra, las mareas oceánicas o la circulación atmosférica.
Teniendo en cuenta todos los elementos conocidos y las fluctuaciones posibles, el grupo de científicos creó una tecnología avanzada (interferómetro láser de anillo óptico) para determinar las variaciones en la velocidad de rotación de nuestro planeta (con una precisión de milisegundos) y de esta manera, confirmar si efectivamente estamos caminando hacia las 25 horas y en qué momento podremos disfrutarlas.
Desaceleración de La Tierra
No ocurrirá mañana ni lo verán nuestros tataranietos ni nuestros cuadrinietos ni tetranietos… Sucederá progresivamente. Ahora mismo, ni siquiera estamos en las 24 horas exactas. Nos encontramos en las 23 horas y 56 minutos. Según los resultados del estudio alemán, la rotación de la Tierra se modifica alrededor de 1,7 milisegundos por siglo. Es decir, alcanzaremos las 25 horas de jornada en unos 200 millones de años.
Cabe recordar que fue con la formación de la Luna cuando nuestro planeta dejó de girar en tan sólo seis horas. La Ley de Gravitación Universal tuyo un impacto directo y así lo explica en un artículo publicado en la revista ‘Science Advances’ el astrofísico Norman Murray: “Si hace entre 2.600 y 2.000 millones de años, un día en la Tierra duraba 19,5 horas y se ha ido extendiendo, esto significa que con el paso de los años, los días alcanzarán las 25 horas”.
Aunque no lo viviremos, lo cierto es que son infinitos los interrogantes que nos plantea el universo. Nada es definitivo, menos aún el tiempo. No sabemos cómo afectará a las futuras vidas ni cuál será el impacto que tendrá en nuestros ecosistemas.