«Waterworld», la película de los 90 que hundió (en todos los sentidos) a Kevin Costner y probablemente el mayor fiasco del cine, mostraba un futuro postapocalíptico en el que la Tierra estaba completamente cubierta de agua. Si quitamos a los imitadores mojados de Mad Max y los gigantescos decorados de acero, quizás el filme no sea tan disparatado.
¡Al menos si se hace una precuela! Claro que habría que retrotaerse mucho en el tiempo. Una nueva investigación publicada en «Nature Geoscience» sugiere que nuestro planeta pudo ser un mundo acuático, sin ningún gran continente a la vista, hace unos 3.200 millones de años, cuando surgieron las primeras formas de vida.
Los investigadores Benjamin Johnson y Boswell Wing, de la Universidad de Boswell, estudiaron un sitio geológico llamado Panorama, ubicado en el interior del noroeste de Australia.
En la actualidad el lugar está compuesto por colinas onduladas repletas de matorrales y cortadas por lechos de ríos secos. Pero ese secarral también es el lugar donde descansa de lado un trozo de corteza oceánica de hace 3.200 millones de años.
Por increíble que parezca, en el transcurso de un día, uno puede caminar a través de lo que solía ser la capa exterior dura del planeta, desde la base de esa corteza hasta los lugares donde el agua una vez burbujeó en el fondo marino por respiraderos hidrotermales.
Los investigadores lo vieron como una oportunidad única para obtener pistas sobre la química del agua del océano de hace miles de millones de años. «No hay muestras de agua oceánica tan antigua, pero sí tenemos rocas que interactuaron con esa agua y recordaron esa interacción», afirma Johnson.
Isótopos de oxígeno
Los investigadores analizaron datos de más de 100 muestras de rocas de todo el terreno seco. Buscaban, en particular, dos sabores diferentes, o isótopos, de oxígeno atrapados en la piedra: un átomo ligeramente más pesado llamado oxígeno-18 y uno más ligero llamado oxígeno-16.
La pareja descubrió que la proporción de esos dos isótopos de oxígeno pudieron haber estado un poco fuera del agua del mar hace 3.200 millones de años, con solo una pizca más de átomos de oxígeno-18 de lo que veríamos hoy. «Aunque estas diferencias de masa parecen pequeñas, son súper sensibles», asegura Wing.
El motivo, según el autor, es que las masas de tierra de hoy están cubiertas por suelos ricos en arcilla que absorben desproporcionadamente los isótopos de oxígeno más pesados del agua, como aspiradoras minerales para el oxígeno-18.
Zonas de tierra seca
El equipo teorizó que la explicación más probable para ese exceso de oxígeno-18 en los antiguos océanos era que simplemente no había continentes ricos en tierra para absorber los isótopos. Sin embargo, eso no significa que no hubiera zonas de tierra seca alrededor.
«No hay nada en lo que hayamos hecho que diga que no se pueden tener pequeños continentes que sobresalen de los océanos», señala Wing. «Simplemente no creemos que haya habido una formación de suelos continentales a escala global como la que tenemos hoy», subraya.
Esto lleva a los investigadores a preguntarse cuándo la tectónica de placas empujó los pedazos de roca que eventualmente se convertirían en los continentes que conocemos. Wing y Johnson no están seguros, pero planean explorar otras formaciones rocosas más jóvenes en sitios desde Arizona hasta Sudáfrica para ver si pueden detectar cuándo las masas de tierra comenzaron a «rugir».
«Tratar de llenar ese vacío es realmente importante», dicen los investigadores. Los hallazgos también podrían ayudar a los científicos a comprender mejor cómo y dónde surgieron los organismos unicelulares por primera vez en la Tierra. Costner ya puede comenzar a planificar la precuela.
Fuente: ABC,
Artículo de referencia: https://www.abc.es/ciencia/abci-tierra-primitiva-pudo-haber-sido-mundo-acuatico-202003030949_noticia.html,