La firma se ha llevado a cabo entre los representantes del Instituto Aragonés del Agua y de la sociedad concesionaria, la UTE Sociedad Aguas Residuales de los Pirineos S.A., formada por Elecnor S.A. y Tedagua S.A. A la firma también han asistido el alcalde de Bisecas, Luis Estaún, y el de Gavín, Javier Aínsa, así como el presidente de la comarca del Alto Gállego, Mariano Fañanás.
Tras la firma, se han trasladado hasta el terreno donde se va a construir la depuradora y ver el inicio de los trabajos. Como ha señalado el consejero, "este proyecto, que comenzó en 1993, celebra un día muy importante ya que arrancan las primeras obras del Plan Pirineos; un proyecto importante por tres razones: la inversión de más de 350 millones de euros, incluida la construcción y explotación durante 20 años, la creación de unos 7.000 puestos de trabajo, y la mejora en la calidad de las aguas de todos los ríos pirenaicos".
Esta actuación dará servicio a Biescas y Gavín y el coste de la construcción asciende a 7,3 millones de euros. Esta EDAR se encuentra en la zona P2, una de las cuatro zonas en las que se dividió el Plan Pirineos para acometer su ejecución, correspondientes a cada una de las cuatro comarcas pirenaicas. En total, en la zona P-2, correspondiente a la comarca del Alto Gállego, se construirán 56 depuradoras de distinta capacidad, que darán servicio a 58 núcleos de población.
Plan Pirineos
El Plan Pirineos supone una inversión de 350 millones de euros durante 20 años y se estima que generará unos 7.000 empleos entre directos e indirectos en el periodo de construcción. Las obras de este plan las ejecuta el Instituto Aragonés del Agua a través de la empresa pública Sodemasa, y se financia mediante un sistema de cooperación público-privada, el de concesión de obra pública, de manera que las empresas concesionarias adelantan la inversión para su construcción y explotación. Este sistema es el que se viene utilizando ya con éxito, de forma pionera en nuestro país, en el Plan Especial de Depuración de Aguas Residuales de Aragón.
Las actuaciones del Plan Pirineos están declaradas de interés general por el Gobierno central, y las ejecuta el Gobierno de Aragón mediante una encomienda, suscrita en el marco del Plan Nacional de Calidad de las Aguas. Gracias al convenio firmado entre el Gobierno de Aragón y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Aragón recibe una aportación de 169 millones de euros.