Sin embargo, la cifra, si se toman como referencia los criterios de legalidad de la UE, es del 37% del total, aunque los responsables del estudio han destacado que este patrón toma en cuenta únicamente "el desarrollo", mientras que las recomendaciones de la OMS aportan "datos objetivos" sobre la incidencia de la composición del aire sobre la salud humana.
De hecho, el responsable de Calidad del Aire de Ecologistas en Acción, Juan Bárcena, ha asegurado que, según "estudios europeos", existe una relación directa de causa entre los niveles de contaminación del aire en el continente europeo y la muerte prematura de más de 400.000 personas en el territorio en 2012, de las cuales 19.940 tuvieron lugar en España, aunque los datos del Ministerio de Medio Ambiente sitúan esta cifra en 16.000.
Asimismo, ha recordado que la OMS declaró recientemente que existe "evidencia científica" de que la contaminación del aire de las ciudades, metrópolis y poblaciones es un agente cancerígeno "de primer nivel" y ha señalado que, además, provoca un aumento y agravamiento de las enfermedades e infecciones respiratorias, reduce la capacidad pulmonar e incide en la proliferación de alergias y la reducción de la calidad de vida, además de provocar un aumento de la mortalidad prematura.
"Cuanto más se sabe, se ve que los efectos son aún peores. Las conclusiones de los científicos es que se estaba subestimando el problema que supone una mala calidad del aire para la salud", asegura.
En este sentido, la organización ha destacado que los niveles de contaminación del aire en España han experimentado una "cierta reducción" desde que alcanzaran en 2007 sus niveles más altos, aunque ha explicado que este no se debe necesariamente al esfuerzo de las administraciones por poner fin al problema sino a la crisis económica, que ha provocado una reducción de la movilidad, de la actividad industrial y de la evolución del parque automovilístico hacia "vehículos más pequeños y eficientes", y a factores climatológicos.
Así, ha criticado la falta de actuación de las Administraciones Públicas ante el problema de la calidad del aire y ha recordado que en varias ocasiones las autoridades europeas han iniciado procedimientos de sanción a España por incumplir los límites de contaminación establecidos por la UE, en 2005 y 2010. "Pasan los años y se sigue en la misma situación", ha lamentado.
Según Bárcena, el actual Gobierno, "después de no aplicar el plan del gobierno anterior, presentó un nuevo plan muy parecido, con los mismos problemas y en el que no concedía presupuesto para llevar a cabo las propuestas ni tenía rango de ley", por lo que asegura que "se quedaron en meras recomendaciones".
En la misma línea, recuerda que algunas administraciones autonómicas y locales han presentado planes de mejora de calidad del aire pero cree que no tienen "voluntad política" de resolver el problema y señala que no tienen "objetivos concretos de reducción de la contaminación" ni sistemas de medición de los resultados.
Además, "el aumento de la velocidad máxima de circulación en algunos tramos de carretera tampoco ayuda", ha apuntado el responsable de Transportes de la organización ecologista, Mariano González.
Bárcena ha criticado también la falta de información "adecuada y ajustada" sobre la calidad del aire por parte de los organismos públicos y ha asegurado que hay que "conocer toda la legislación relacionada, ser un informático y hacer un montón de cálculos" para sacar algo en claro de los datos que publica el Gobierno.
A su juicio, la falta de información por parte del ciudadano impide que la gente "tome conciencia" del problema y tome medidas como cambiar algunos de sus hábitos para reducir la contaminación. "Cada paso que se da se traduce en menos contaminación, hay que ir en esa senda", ha insistido.
Por ello, la organización ha puesto en marcha una campaña de micromecenzago, a través de la fundación Hazloposible, para desarrollar una aplicación para teléfonos móviles que permita conocer los niveles de contaminación de las ciudades en tiempo real, con el objetivo de "suplir lo que "la administración debería hacer y no hace", según ha explicado el responsable de Calidad del Aire.