El sábado pasado se celebró el Día mundial de la reducción de emisiones de CO2
El 28 de enero se celebró el Día Mundial de la Reducción de Emisiones de CO2 2017, una fecha imprescindible en el calendario medioambiental, ya que de ella depende nuestra vida en los años venideros, además del compromiso de nuestros gobiernos, de las empresas y de cada uno de nosotros. Así de tajante resulta esta afirmación, con la que nos queda todavía mucho que lidiar.
Después de que se firmara el Acuerdo de París (2015), en el que 111 países ratificaron su intención con un acuerdo histórico por el que se responsabilizaron de la reducción de emisiones, y con la obligación de no superar 1,5 grados centígrados en la subida de las temperaturas globales; la Cumbre del Clima en la ciudad de Marrakech (Marruecos) el pasado noviembre, ha supuesto otro nuevo compromiso medioambiental que parece no tener marcha atrás: la inversión en energías renovables o limpias en países en vías de desarrollo, Under2 Coalition se compromete a reducir las emisiones en un 80% para el año 2020, ratificar y aplicar sin excepción las normas del Acuerdo de París, y el nacimiento de multitud de instituciones y organizaciones creadas en aras de la sostenibilidad (teniendo como temas principales: la adaptación al clima, el Agua, la Agricultura, África, la Tecnología, etc.).
Nuestro compromiso para reducir las emisiones de CO2 son bastante menos complicados y más llevaderos que los acuerdos a nivel global. Por eso, ya es hora de pensar que nuestro planeta lo vale y actuemos a tiempo, si queremos conservar al menos un lugar para poder vivir.
¿Qué medidas habría que adoptar para reducir las emisiones de CO2 ?
- Reducir el uso del coche: Camina, patina, usa la bicicleta o corre. Las actividades físicas te vienen fenomenal para cuidar tu salud, y de paso no contaminan. Cambia de mentalidad, e incorpora el transporte público a tu rutina. Si no puedes dejar el automóvil en casa, apuesta por los nuevos modelos híbrido o eléctricos.
- Pensar antes de usar la energía de tu hogar: Encender tus electrodomésticos y utilizarlos consume mucha energía, también el mantener las luces encendidas (cambia las bombillas por otras de bajo consumo), subir la calefacción dos grados puede ser un coste muy caro que no favorece a nadie (si tienes frío, abrígate). Lo mismo ocurre con el ascensor de tu vivienda: procura usar las escaleras cuando no lleves peso.
- Replantearse de dónde vienen todos los productos que consumimos normalmente: Seguramente muchos de ellos han cruzado medio mundo para estar entre tus manos. Fomenta el consumo de km 0, ahorra mucho y no deja una huella de carbono demasiado profunda. Reciclar, reutilizar y reducir deben estar presentes en tu vida. Simplemente eligiendo esos objetos más fáciles de reciclar y evitando el plástico (daña mucho y se necesita mucha energía para reutilizarlo): alimentos sin bolsas, teniendo preferencia el vidrio a las latas de conserva. Evita renovar el armario cada temporada, eso puede suponer un gasto para tu bolsillo desaconsejable, y para el medio ambiente mucho más. Realiza trueque, recicla tu ropa, o adquiere prendas de segunda mano o ecológicas.