España logró recortar un 1,7 por ciento (7,5 millones de toneladas equivalentes de CO2) sus emisiones de efecto invernadero en 2006, pero pese a esta disminución se mantiene como el país de la Unión Europea que más se aleja de los objetivos del protocolo de Kioto, según el informe anual de la Agencia Europea de Medio Ambiente hecho público hoy. Desde 1990, España acumula un incremento de las emisiones del 49,5 por ciento , muy lejos del 15 por ciento que se le autorizó en virtud del reparto interno de las cargas de Kioto que hizo la UE.
En conjunto, los antiguos 15 Estados miembros (UE-15) redujeron sus emisiones un 0,8 por ciento en 2006, y acumulan una disminución del 2,7 por ciento desde 1990, lo que les sitúa en buena vía para alcanzar entre 2008 y 2012 el recorte del 8 por ciento al que les obliga Kioto, según explicó la Comisión Europea. Si se cuenta a los Veintisiete, el recorte en 2006 fue del 0,3 por ciento y el acumulado del 10,8 por ciento.
El principal factor que explica este descenso es el menor consumo de gas y petróleo en los hogares y servicios, que representó una reducción de emisiones de 16,6 millones de toneladas, especialmente en Bélgica, Francia, Italia, España y Reino Unido. Ello fue debido a un menor uso de la calefacción en Europa porque el año 2006 fue más cálido que la media y al aumento de los precios del gas. La demanda de electricidad en los hogares se mantuvo estable.
En contraste, Dinamarca y Finlandia experimentaron los mayores incrementos de gases de efecto invernadero (10,9 y 16,3 por ciebto respectivamente) ya que en los dos países se recurrió más que otros años a combustibles fósiles sólidos para generación de electricidad.
Por su parte, las emisiones del transporte por carretera crecieron un 0,7 (6,5 millones de toneladas de CO2) a causa del mayor uso de gasóleo en el transporte de mercancías y de pasajeros. También se incrementaron las emisiones de la aviación (5 toneladas) y del transporte marítimo (10 millones).
El comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas, dijo que la reducción de las emisiones en la UE-15 es "alentadora" pero reclamó a los Estados miembros "seguir acelerando esfuerzos para limitar o reducir sus emisiones".
Dimas lamentó que en la mayor parte de los 12 países de la ampliación aumentaran las emisiones en 2006. "Esos países tienen que tener presente que no pueden contar con los éxitos del pasado. Nuestras metas de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero después de 2012 tienen que cumplirlas todos los países de la UE-27 juntos, y todos ellos tendrán que realizar esfuerzos constantes", declaró en un comunicado.