La lluvia de estrellas de noviembre, conocida como las Leónidas porque coinciden con la constelación de Leo, podrá seguir disfrutándose hoy en España. Sin embargo, hoy no habrá tanta intensidad como ayer, cuando se registró el punto máximo de esta efeméride otoñal que comenzó el 14 de noviembre y cuyo final está previsto para el próximo viernes.
Un portavoz del Observatorio Astronómico Nacional indicó a Europa Press que esta pasada madrugada, varios observadores informaron de avistamientos de hasta 60 estrellas fugaces en la República Checa en el plazo de 12 horas y de hasta 17 en Holanda en cinco horas, respectivamente. También, añadió que de acuerdo a las predicciones del Instituto de Mecánica Celeste y Cálculo de Efemérides de París (Francia), el máximo de este fenómeno se produjo a las 01.32 horas GMT (02.32 horas en España) pero hoy se prevé un segundo máximo a las 21.38 GMT (22.38 horas en España), aunque de menor intensidad.
Así, el portavoz del observatorio indicó que durante el momento máximo previsto para esta noche «no va a estar la luna», lo que favorecerá la observación de las Leónidas. Sin embargo, añadió que el momento en que mejor se pueden ver es cuando la constelación de Leo está más alta y eso será «muy pronto», ya que el mejor momento «suele ser durante la madrugada». «Por la zona horaria, sería mejor estar en otro punto del planeta», explicó. Aún así, los lugares idóneos para la observación son las zonas despejadas, con cielo oscuro y lejos de las ciudades y no son necesarios instrumentos de observación, ya que lo que se requiere es el mayor campo de visión posible.
La predicción para hoy es de entre 10 y 100 meteoros por hora corregidos hacia el cenit, mientras que en el punto máximo de ayer la previsión era de 100 meteoros por hora corregidos hacia el cenit. Esto indica que los avistamientos de hoy serán «probablemente mucho menores, es decir que podrían advertirse entre 20 o 30 estrellas fugaces».
En realidad estas Leónidas no son estrellas, sino que el fenómeno se produce cuando la Tierra cruza una zona de polvo de la cola de un cometa, cuyas partículas «se queman» al entrar en contacto con la atmósfera, y eso es lo que permite ver ese haz de luz durante escasos segundos. Las Leónidas dependen asimismo de la cantidad y distribución de ese polvo de cometa.
En España se podrá contemplar este fenómeno, pero el brillo de la luna, que se está aproximando a la constelación de Leo será un «serio problema para los observadores» de cualquier latitud, según el citado instituto francés.