«Salgo a la calle que necesito respirar aire fresco y puro». Muchas veces hemos dicho esa frase, ¿pero es tan puro como querríamos? Ecologistas en Acción ha lanzado este lunes su informe anual de la calidad del aire en España en 2021, y los resultados muestran que no lo es, pese a algunas mejoras constatadas. «En 2021 respiramos un aire con contaminación por encima de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS)», señala en la rueda de prensa el portavoz del grupo ecologista, Miguel Ángel Ceballos.
Y es que, aunque se ha observado cierto progreso en la reducción de los niveles de dióxido de nitrógeno, de azufre, de ozono y de las partículas en suspensión entre 2019 y 2021, España sigue siendo uno de los países más afectados por la contaminación atmosférica en toda Europa -aún habiendo registrado el año pasado los niveles más bajos medidos desde 1990-.
En 2021 la calidad del aire mantuvo el progreso ya obtenido en 2020 debido a la restricción de la movilidad por los efectos de la pandemia de Covid-19 y el cierre de la mayor parte de las centrales termoeléctricas de carbón. Ceballos subraya que «afortunadamente este cierre fue algo bueno porque eran las centrales las que más contaminaban». Es por ello que se vieron afectadas siete millones de personas menos respecto a 2019.
Pero el transporte y la industria siguen siendo los principales detonantes de la contaminación. Madrid es, una vez más, el mayor foco de aire contaminado en España. La capital fue la única ciudad que superó el límite legal establecido por la OMS en cuanto a los niveles de dióxido de nitrógeno -aunque Barcelona no anduvo muy lejos-, y de ozono.
Madrid incumple el límite legal de contaminación
«Madrid incumplió el límite legal. Fue la única de las 800 ciudades españolas en incumplirlo», explica Ceballos. «Tenemos una situación grave en la zona de Madrid que amenaza con repetirse, ya que Barcelona también está por encima de los niveles en lo que llevamos de 2022», advierte.
En total, fueron más de cinco millones de personas las que respiraron aire contaminado por encima de los límites legales en nuestro país. Pero, según los nuevos niveles de calidad de aire establecidos por la OMS -más estrictos-, la contaminación de la población española resultó afectada por la polución, que abarcó una una extensión de 400.000 kilómetros cuadrados (un 80% del territorio).
Por otro lado, Ceballos advierte que «todavía hay muchas zonas que no están midiendo las partículas finas contaminantes, que son las que más contaminan» y que «el ozono afectó de manera más extensa prácticamente a todo el territorio español». También destaca otro contaminante que está cogiendo fuerza, el benzo, «muy poco medido pero que en los últimos años está experimentando una tendencia al alza y que se incumplió en la provincia de Jaén». El benzo es un cancerígeno relacionado con la quema de biomasa y de carbón.
30.000 españoles fallecen prematuramente
Ecologistas en acción sostiene que hasta 30.000 españoles fallecen prematuramente a causa de la contaminación atmosférica y millones de personas de grupos sensibles ven afectada su vida por esto (niños, personas con enfermedades crónicas, mujeres gestantes y la tercera edad). «Preocupa mucho la situación infantil», se lamenta el portavoz. Es por ello que están empezando a hacer campañas en centros educativos que «pretenden apoyar y empujar la declaración de espacios libres de humos», dice Carmen Duce, coordinadora de transporte. «Espacios donde los niños puedan ir seguros en bicicleta o patinete».
Pero no sólo afecta a la población. También a la vegetación y a los animales. «La contaminación en estos sectores lleva al debilitamiento de las plantas y enfermedades en animales», afirma Ceballos. La organización ecologista propone asimismo una serie de medidas para reducir la contaminación. Así, Juan Bárcena, coordinador de calidad del aire, recomienda «reducir el tráfico motorizado, potenciar la movilidad activa y el transporte público, limitar el funcionamiento de determinadas industrias, penalizar el uso del diésel y reducir el uso del transporte aéreo y marítimo».
Fuente: ESTHER PINILLA J. / EL MUNDO
Artículo de referencia: https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/medio-ambiente/2022/06/27/62b9999bfc6c8395188b4583.html