La agencia europea señala que solo se redujeron las emisiones en España, Grecia y Portugal, donde se mantuvo la crisis. Así, las emisiones de GEI de los 27 estados miembros de la UE, se incrementaron en un 2,4% en 2010, con respecto a 2009, algo que parcialmente se explica por la caída del 7,3% (365 millones de toneladas) de 2008 a 2009.
La Unión Europea mantiene intacto su compromiso de cumplir los objetivos de Kioto y la tendencia, en el largo plazo, sigue reduciéndose. Sin embargo, las emisiones siguen siendo un 15,4% superiores a los niveles de 1990. En cuanto a la UE15 (los quince países que tienen un compromiso común bajo el Protocolo de Kioto) se mantuvieron en 2010 en un 11% sobre el objetivo de año base para el protocolo.
"Las emisiones aumentaron en 2010. Este efecto rebote se esperaba de acuerdo a la salida de la mayor parte de Europa de la recesión", ha comentado la directora ejecutiva de la Agencia Europea del Medio Ambiente, Jacqueline McGlade. El crecimiento de las emisiones se debió sobre todo a la recuperación económica (2% de crecimiento en la UE en 2010), ya que muchos países europeos emergieron de la recesión de 2009. Además, se experimentó una mayor demanda de energía, del 3,7% en ese ejercicio, lo que contribuyó al aumento de las emisiones.
Asimismo, el invierno de ese año fue más frío que los años anteriores, por lo que la demanda energética para las calefacciones también fue superior. Sin embargo, este crecimiento también incluye otros factores, ya que en años previos aumentó el uso de las fuentes de energía de origen renovable, con un ascenso del 12,7%. Además, los precios del gas cayeron en 2010 y el consumo de gas para fines energéticos se elevó hasta el 7,4%.
El estudio de la Agencia destaca también que las emisiones fueron más elevadas en la mayoría de los sectores clave en 2010, principalmente en aquellos sectores que dependen de los combustibles fósiles. Estos incluyen las emisiones de CO2 de los sectores residencial y comercial (por el frío invierno), de las industrias de manufacturas y construcción y del sector público y la producción eléctrica.
Además, apunta que las emisiones del tráfico rodado continuaron cayendo en 2010, a pesar de una mayor demanda del transporte, así como las de hidrofluorocarbonos de la industria crecieron "significativamente" en 2010, continuando su tendencia ascendente desde 1990. Sin embargo, las emisiones de metano y óxidos de nitrógeno descendieron.
Por países, los principales estados que contribuyeron al aumento de las emisiones en 2010 fueron Alemania, Polonia y Reino Unido, que causaron el 56% del crecimiento neto total de las emisiones de hidrofluorocarbonos. El aumento relativo de las emisiones fue superior en Estonia, Finlandia, Suecia y Letonia. Mientras, España, Grecia y Portugal, países que se mantuvieron en recesión en 2010, informaron de un descenso de emisiones en 2010.