Es cultivada por jardines botánicos y coleccionistas privados alrededor del mundo. Su nombre científico es “Amorphophallus titanum” y es la planta herbácea que produce “la flor más grande del mundo”. Algunos la llaman aro gigante, pero los indonesios la llaman “flor cadáver” porque desprende un olor desagradable (similar al de carne podrida).
La flor “cadáver” supera 2 m de altura, puede alcanzar hasta un metro de diámetro y pesar unos 75 kilos. No puede polinizarse por sí misma, así que atrae a abejas del sudor o escarabajos carroñeros que viven en cadáveres de animales.
En su ambiente natural, son estos animales los encargados de transportar el polen de una flor a otra. A los tres días, la flor muere y se pudre, dejando solo una masa negra y gelatinosa.
Dato curioso: En mayo del 2003 la Universidad de Bonn (Alemania) presentó un ejemplar vivo de 2,74 m de altura.