El pasado viernes, 17 de septiembre, finalizó el Smart Chemistry Smart Future, foro de encuentro de Industria Química en su tercera edición. En el bloque especialmente destinado a la innovación sobre Economía Circular se presentó un proyecto innovador llamado ChemCycling.
Hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Iván Albertos, Govermment Affairs de la división Química en la empresa BASF, que nos comenta en qué consiste ChemCycling, qué aporta y en qué medida la innovación, en el correcto tratamiento de residuos, es una parte esencial para devolver nuevos productos a la cadena de suministros.
¿En qué consiste exactamente este proyecto?
Se trata de un proceso transformación química para reciclar residuos plásticos mediante pirólisis. El reciclaje químico es una tecnología complementaria al reciclaje mecánico. ChemCycling permite convertir aquellos residuos plásticos difíciles de reciclar mecánicamente tales como plásticos mixtos, plásticos con residuos, envases multicapa de alimentos o neumáticos usados, que suelen terminar en incineradoras o vertederos, en materia prima para la fabricación de nuevos productos, en sustitución de recursos fósiles finitos.
¿En qué medida consideráis que este proyecto suma al concepto de Economía Circular?
El objetivo de este proyecto y de esta tecnología, es evitar la generación de residuos que terminan en vertedero o incineración. Con el reciclado de los residuos plásticos conseguimos dar una nueva vida a estos residuos, e incorporarlos a través del aceite de pirólisis de nuevo en la cadena de producción química, y evitando así la extracción de recursos fósiles. De esta forma, conseguimos cerrar el círculo con estos productos plásticos, que tienen un importante reto de gestión, y contribuir a fomentar una economía más circular en los plásticos.
¿Qué índice de aprovechamiento en los recursos propios de origen se reutilizan?
Actualmente, el índice de aprovechamiento es todavía bajo pero con un enorme potencial de utilización en los próximos años. Existen todavía retos que superar para que esta tecnología se consolide de forma comercial. Uno de ellos es la aceptación del material reciclado por parte de los clientes y de la regulación. Se requiere de metodologías y normas armonizadas y consensuadas que sean aceptadas por parte de las administraciones para que el material reciclado pueda ser contabilizado a efectos del cumplimiento de los objetivos de reciclado.
Durante el año 2020, BASF ya comenzó a suministrar productos a sus clientes procedentes de Chemcycling y tiene acuerdos de colaboración para el suministro del aceite de pirólisis con varias compañías a nivel europeo.
¿Y la reutilización de esos recursos pueden ser el origen de productos para otros sectores?
Por supuesto que sí. El reciclado de productos plásticos post consumo, una vez transformado en aceite de pirólisis e introducido en nuestra cadena de producción, puede servir, tanto para producir plásticos como otros productos químicos que pueden ser útiles para otros sectores.
SOBRE BASF
¿Cuáles son los objetivos principales para cumplir en materia de ODS de la agenda 2030, que os afectan y sobre los que trabajaréis en los próximos años?
En BASF, llevamos a cabo nuestro propósito corporativo, «Creamos química para un futuro sostenible», persiguiendo objetivos ambiciosos a lo largo de toda nuestra cadena de valor. De esta manera, nuestro objetivo es lograr un crecimiento rentable y asumir la responsabilidad social y ambiental.
Esto también ayuda a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. Nos estamos centrando en cuestiones en las que nosotros, como empresa, podemos hacer una contribución significativa, entre otras, el consumo y la producción sostenibles (ODS 12), la acción climática (ODS 13) o la diversidad e igualdad (ODS 5).
En cualquier caso, también tenemos actuaciones en otros ODS, como por ejemplo Salud y bienestar (ODS 3), energía asequible y no contaminante (ODS 7), trabajo decente y crecimiento económico (ODS 8) e industria, innovación e infraestructura (ODS 8).
Por último, estamos firmemente convencidos que para conseguir todos y cada uno de los ODS, tenemos que generar alianzas para afrontar los retos a los que nos enfrentamos. Alianzas, tanto con empresas de nuestro sector, como con empresas e instituciones de otros sectores, con objeto de aportar soluciones desde distintos puntos de vista para poder tener un mayor alcance. Estos trabajos se engloban en el ODS 17 en el que BASF está involucrado en numerosas alianzas y partenariados para conseguir los objetivos a 2030.
Por último, un mensaje de BASF para nuestros químicos para los mas jóvenes, Perspectivas de empleo en el sector químico desde el punto de vista medioambiental
A nivel de sector en España, según datos de FEIQUE (Federación Española de la Industria Química), el crecimiento acumulado del empleo en el sector químico desde el año 2000 al 2020 ha sido de un 27%. En el año 2020, el sector contaba con casi 210.000 empleos directos, con un incremento del 2% con respecto al 2019. En términos de estabilidad, el 94% del empleo directo del sector es indefinido.
Estos datos demuestran la buena salud en términos de empleo que presenta el sector químico. Se trata de un aliciente para aquellos jóvenes que quieran desarrollar su carrera en este sector.
Desde el punto de vista medioambiental, el sector esta inmerso en una profunda transformación digital y medioambiental, con el objetivo de reducir su impacto ambiental y poder cumplir con los compromisos que está imponiendo la Unión Europea. De hecho, en BASF nos hemos marcado el objetivo de alcanzar la neutralidad climática en 2050. Para llevar a cabo esta profunda transformación, se requerirá de nuevas habilidades y de talento, donde el conocimiento y las competencias medioambientales serán clave para poder aportar soluciones que ayuden a alcanzar los retos en materia de sostenibilidad.
Por último, en BASF disponemos de un programa de FP dual transnacional que combina la formación técnica con prácticas en los centros de producción de Tarragona y Ludwigshafen (Alemania). Los aprendices adquieren un nivel B1 de alemán, pueden acceder a una doble titulación y, antes de empezar la formación viajan a Alemania para conocer su futuro entorno de trabajo. Asimismo, BASF tiene una firme apuesta por la empleabilidad juvenil, puesto que todos los aprendices reciben una oferta laboral en BASF una vez finalizada la FP Dual y la tasa de inserción es cercana al 100%.
Fuente: Redacción,