En un artículo publicado por la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA), se pone de manifiesto que África necesita desesperadamente electricidad para su desarrollo socioeconómico. En los últimos 25 años, la demanda ha crecido a una media anual del 3,3%. Para 2040, se espera que la demanda total se triplique a aproximadamente 1600 TWh.
Esta demanda puede satisfacerse con los abundantes recursos renovables del continente, que actualmente se encuentran enormemente desaprovechados. El norte y el sur de África se encuentran entre los lugares más soleados del mundo. Las velocidades del viento son impresionantemente altas en el este, norte y sur de del continente.
En términos de volumen de descarga hidroeléctrica, el río Congo ocupa el segundo lugar después del Amazonas. Para desbloquear este potencial, África necesita revisar sus planes regionales que actualmente favorecen los combustibles fósiles a pesar de los enormes avances y reducciones de costes de las tecnologías renovables.
África: gran potencial renovable
IRENA identificó 4290 zonas de energía renovable en países incluidos en el Corredor Africano de Energía Limpia (ACEC), con recursos solares y eólicos que ofrecen un potencial de generación de hasta 7 TW y 2 TW respectivamente, de las cuales más del 99% aún están sin explotar. Dicho potencial ofrece una oportunidad para que la región integre la energía renovable en sus planes satisfaga sus necesidades energéticas.
Los planes generales actuales de los fondos comunes de energía de África oriental y meridional prevén la adición de más de 100 GW de nuevas plantas de carbón para 2040. IRENA advierte: si no se revisan estos planes, las emisiones anuales de CO2 se triplicarán hasta llegar a 1.200 Mt.
El despliegue de tecnologías solares fotovoltaicas y eólicas en las zonas identificadas, combinado con la inversión en infraestructuras de transmisión adecuadas, puede evitar la acumulación de nuevas plantas de carbón de una manera rentable y compatible con el clima.
Dependencia de los combustibles fósiles
he Global Electricity Review publicó un informe el pasado mes de mayo en el que mostraba que la electricidad generada con combustibles fósiles sigue siendo dominante a nivel mundial: generaron el 61% de la electricidad mundial en 2020, frente al 66% en 2015 cuando se firmó el Acuerdo de París. África es una de las regiones con mayores índices de dependencia.
A pesar de que el el uso de energías renovables como fuente generadora de electricidad crece de manera imparable, en 2020 más de la mitad de los kW procedieron de combustibles fósiles. El carbón fue la fuente más importante, responsable del 34% de la electricidad mundial en 2020.
La dependencia es desigual y África es unas de las regiones más afectadas. No en vano, el informe encuentra niveles superiores a la media en Nigeria (81%) y Sudáfrica (89%) en 2020, también en Egipto (90%), Argelia (99%) y Marruecos (79%) en 2019.
Fuente: IRENA,
Artículo de referencia: https://www.energynews.es/africa-necesita-electricidad-para-su-desarrollo-socioeconomico/,