El creciente uso de los aparatos de aire acondicionado en hogares y oficinas será uno de los principales impulsores de la demanda mundial de electricidad en las próximas tres décadas, según un nuevo análisis de la Agencia Internacional de Energía (AIE), lo que requerirá una nueva capacidad de electricidad equivalente a la capacidad eléctrica combinada de los Estados Unidos, la Unión Europea y Japón en la actualidad. El stock global de aires acondicionados en edificios crecerá a 5.600 millones en 2050, frente a los 1.600 millones actuales, lo que equivale a 10 nuevos dispositivos de aire acondicionado vendidos por segundo durante los próximos 30 años, según el informe.
El uso de aires acondicionados y ventiladores eléctricos para mantenerse fresco ya representa aproximadamente una quinta parte de la electricidad total utilizada en edificios en todo el mundo, o el 10% de todo el consumo mundial de electricidad en la actualidad. Pero a medida que los ingresos y el nivel de vida mejoran en muchos países en desarrollo, el crecimiento de la demanda de dispositivos de aire acondicionado en las regiones más calurosas se disparará. Se espera que el uso de aire acondicionado se convierta en la segunda fuente más grande de crecimiento de la demanda de electricidad a nivel mundial después del sector de la industria.
El suministro de energía a estos aires acondicionados representa grandes costes e implicaciones ambientales. Un factor crucial guarda relación con la eficiencia. Por ejemplo, los aires acondicionados vendidos en Japón y la Unión Europea son habitualmente un 25% más eficientes que los vendidos en los Estados Unidos y China. Las mejoras en la eficiencia podrían reducir a la mitad el crecimiento de la demanda de energía de aires acondicionados a través de los estándares obligatorios de rendimiento energético.
En un escenario de "Enfriamiento Eficiente", que es compatible con los objetivos del Acuerdo de París, la AIE sugiere estrictos estándares mínimos de rendimiento energético y otras acciones, como el etiquetado, así como reducir en la medida de lo posible la necesidad de construir una nueva infraestructura eléctrica para satisfacer la creciente demanda. Promover una refrigeración más eficiente también generará múltiples beneficios, haciéndola más asequible, más segura y más sostenible, y ahorrando hasta 2,9 billones de dólares en inversión, combustible y otros gastos de operación. El aumento de la demanda de refrigeración será particularmente importante en las regiones más cálidas del mundo.
En la actualidad, menos de un tercio de los hogares del mundo poseen un aire acondicionado. En países como Estados Unidos y Japón, más del 90% de los hogares tienen aire acondicionado, en comparación con solo el 8% de los 2.800 millones de personas que viven en las partes más cálidas del mundo.
El problema es particularmente delicado en las naciones que más rápido se están desarrollando, con un aumento especialmente significativo en países cálidos como India, donde la participación de los aires acondicionados en la carga máxima de electricidad podría alcanzar el 45% en 2050, frente al 10% actual. Esto requerirá grandes inversiones en nuevas plantas de energía para satisfacer la demanda pico de energía por la noche, que no se puede cumplir con la tecnología solar fotovoltaica, detalla la AIE.