Tal y como informa Enresa, un año después ya se han efectuado los primeros desmontajes convencionales, y se han realizado numerosas modificaciones en la central, requeridas para acometer el resto del proyecto. La importancia de la seguridad en este proyecto, a la que se destina un 25% de la inversión total, ha permitido que en este primer año no se haya producido ningún incidente.
Coincidiendo con este primer aniversario la empresa pública está a punto de finalizar el vaciado del edificio que albergó las turbinas de la central nuclear. El condensador, gracias al cual volvía a fase líquida el vapor de agua que movía la turbina, ha sido el último componente en desmontar y retirar del gran edificio, que ocupa cuatro plantas. En su nueva función, ese gran espacio anexo al edificio de contención se habilitará como recinto de acondicionamiento de los residuos radiactivos que se generen en el desmantelamiento de partes activas, proceso que comenzará este mismo año.
Un taller de descontaminación, un taller de corte, instalaciones para la transferencia de residuos a contenedores de hormigón, además de zonas de almacenamiento temporal, compondrán esta nueva área.
El desmontaje de los componentes del edificio de turbina ha sido, junto con el derribo de las diez torres de refrigeración con las que contaba la central, la retirada de transformador principal y la adaptación de diversos sistemas de la planta, una de las actividades preparatorias más importantes de este primer año de desmantelamiento.
Otro de los aspectos fundamentales, tal y como recoge Enresa, a la hora de acometer el desmontaje de partes activas es el proceso de desclasificación de materiales. La desclasificación consiste en demostrar, mediante la aplicación de una metodología de caracterización específica, que un material procedente de zona radiológica puede ser tratado como convencional. Un elemento clave en la citada metodología es el denominado "medidor de bajo fondo", que acaba de ser instalado en el recinto de José Cabrera y que permitirá, una vez haya sido puesto a punto y gracias a su gran sensibilidad, segregar el material contaminado del que no lo está.
Durante estos primeros doce meses se han generado cerca de 3.000 toneladas de materiales, todos ellos convencionales, que han sido enviados a gestores autorizados para su posterior reutilización.
Puestos de trabajo
En cuanto al empleo, en la central trabajan diariamente 261 personas, pertenecientes a 39 empresas diferentes. El 60% de los trabajadores son de la provincia de Guadalajara.