La presidenta Cospedal ha señalado que este plan, que el Gobierno regional pondrá en marcha durante el primer semestre de 2013, va suponer la primera estrategia energética de la comunidad autónoma, “una estrategia compacta que va a tener en cuenta todas las fuentes de energía”.
Durante la inauguración de las centrales termosolares Helios 1 y 2 de la Plataforma Solar Castilla-La Mancha de la empresa Abengoa, en la provincia de Ciudad Real, Cospedal ha afirmado que esta iniciativa servirá para garantizar el suministro de energías, “a corto, medio y a largo plazo”.
Asimismo, ha explicado, el Plan Energético de Castilla-La Mancha Horizonte 2020 será un instrumento con el que promocionar el uso de las energías limpias a favor de “un modelo de desarrollo completamente sostenible y reducir emisiones de gases con efecto invernadero a partir del mejor uso de la energía y promoción de las renovables”.
En su intervención, la presidenta de Castilla-La Mancha ha destacado que la infraestructura que se ha inaugurado, cuenta con dos centrales termosolares con una superficie de más de 200 hectáreas y con una producción de 100 megavatios, “una plataforma de extraordinaria importancia en la creación de energía”.
Cospedal ha destacado, además, que la energía que se produce en estas centrales termosolares produce una disminución de 60 mil toneladas de CO2, un dato que ayuda a cumplir con la normativa europea que obliga a reducir el dióxido de carbono y aumentar las energías renovables.
Castilla-La Mancha, lugar estratégico para la inversión
“Castilla-La Mancha necesita industria, negocio, actividad económica con vocación de permanencia en el tiempo, industrias que tengan musculo financiero”, ha declarado la presidenta. Para ello, Cospedal ha apelado a la necesidad de crear una administración “amigable” y ofrecer desde todos los ámbitos: “administrativos, jurídicos, económicos, fiscales y financieros, las condiciones para la llegada y asentamiento de nuevas empresas a nuestra tierra”.
En este sentido, María Dolores Cospedal ha destacado la apuesta del Gobierno de Castilla-La Mancha por atraer nuevas inversiones en la región que la conviertan en “un lugar estratégico para nuevas empresas de España y del resto del mundo” para, de este modo, “lograr la recuperación económica”.