Con la presencia de la Ministra del Medio Ambiente, María Ignacia Benítez, del Ministro de Energía Jorge Bunster, del Subsecretario de Agricultura, Álvaro Cruzat, del Intendente Wladimir Román y del Seremi del Medio Ambiente, Felipe Avendaño, se realizó la inauguración de las plantas Santa Irene y Las Palmas en Pichidegua, Región del Libertador General Bernardo O´Higgins.
Ambas plantas no sólo permiten eliminar el mal olor ocasionado por el proceso de la industria porcina y las moscas que esto conlleva, sino que además beneficiarán a la comunidad, ya que abastecerán de energía eléctrica a cerca de 2500 familias de Pichidegua. Esto, gracias a los residuos de 80 mil cerdos, los que producirán 700 m3 de desechos al día, los que se convertirán en gas, que a su vez generará un mega de electricidad.
Tras conocer ambas instalaciones, la Ministra Benítez destacó estas plantas, porque "son un buen reflejo de que es posible obtener energía de lo que antes considerábamos simplemente desperdicios. La industria porcina es una industria importante en esta región y en nuestro país. Por eso quiero destacar esta iniciativa, ya que con ingenio e innovación se está haciendo cargo de uno de los impactos ambientales que tiene esta industria, que son los purines de cerdo. Y no de cualquier manera, sino que agregando valor mediante la generación de energía renovable a partir del biogás que generan estos purines", señaló.
En ese sentido agregó que "es muestra de cómo se puede conjugar la innovación, la tecnología y el cuidado del medio ambiente, todo en beneficio de la calidad de vida de los chilenos".
La iniciativa es impulsada por la agroindustrial Maxagro, encargada de proporcionar los residuos que permitirán generar entre 800 KWh y 1 MWh de energía que será inyectada al Sistema Interconectado Central (SIC). En tanto, la empresa Genera Austral, es la empresa responsable de invertir en el diseño, desarrollo y operación de las plantas.