Las plantas de energías renovables que funcionan o están ya en trámite en los 46 municipios del área metropolitana de Sevilla serán capaces de producir, cuando estén a pleno rendimiento, electricidad como para abastecer a toda la población de la Gran Sevilla, incluida la capital. En la zona están en marcha o en proyecto más de un centenar de instalaciones, entre plantas fotovoltaicas, termosolares y eólicas, que suman casi 2.448 megavatios, suficientes como para satisfacer el consumo doméstico de más de un millón y medio de personas.
Planta termosolar en Sanlúcar la mayor |
La relación ha sido recogida en la nueva redacción del Plan de Ordenación Territorial de la Aglomeración Urbana de Sevilla (Potaus), que la Junta pretende aprobar antes de final de año tras resolver las más de 300 alegaciones que se presentaron al borrador. En el documento se han incorporado, como novedad, una serie de criterios y parámetros que, además del preceptivo informe de impacto ambiental o los requisitos de Innovación, las nuevas iniciativas deberán cumplir para instalarse.
Nuevos criterios para su ubicación
Lo más destacado es que la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta abre la mano para que puedan ubicarse en suelos rústicos protegidos como «espacios agrarios de interés», una denominación que en otras ocasiones ha servido para vetar proyectos de carácter residencial que algunos ayuntamientos han intentado promover, sobre todo en la comarca del Aljarafe y en zonas de olivar abandonado.
La Junta prohíbe, eso sí, que se instalen en espacios naturales o protegidos por Cultura. En el caso de las plantas termosolares, como la que ya funciona en Sanlúcar y que requieren grandes cantidades de agua para funcionar, sólo podrán instalarse donde existan recursos hídricos suficientes. En el documento se apunta que serán los PGOU y las ordenanzas de edificación de cada municipio los que tendrán que recoger medidas que «eviten su impacto paisajístico» y los suelos que quedarán «preservados», aunque se aboga explícitamente por potenciar e «incentivar» no sólo estas plantas industriales, que suponen un alivio a las emisiones de dióxido de carbono, sino los pequeños equipos fotovoltaicos en tejados de viviendas y edificios públicos. Sólo las instalaciones que ya están funcionando en la zona, generan la energía que consumen unas 51.000 personas y evitan una emisión de 113.000 toneladas de CO2 a la atmósfera, «una cantidad similar a la que puede absorber una superficie verde equivalente a 20 parques del Alamillo», se apunta en el informe sobre energías renovables que, como el resto de aspectos del Potaus, se tratará en la comisión de redacción que volverá a reunirse en Sevilla el próximo miércoles.
Nuevas plantas en proyecto
En lo que respecta a las fotovoltaicas -donde las placas solares evacuan directamente a la red y su producción depende de la meteorología- todas las que se recogen están funcionando y suman 67 megavatios, suficientes para abastecer a más de 44.000 vecinos. En cuanto a las termosolares -que requieren de mayor inversión, mucha más extensión de terreno y en las que la energía del sol se usa junto a otros combustibles para calentar algún fluido y generar la energía-, sólo está en funcionamiento la primera planta de 11 megavatios de las previstas en Sanlúcar. Pero hay proyectos en trámite por 2.300 megavatios más, capaces de abastecer a 633.000 personas.
La orografía del área metropolitana supone una limitación para los parques eólicos, que aprovechan la fuerza del viento. Con todo, en el ámbito del Potaus están previstos tres parques de este tipo, dos en Carmona y uno en Utrera, que podrían satisfacer las necesidades de luz de 40.000 personas.
La puesta en marcha de todas estas plantas es estratégica para garantizar un «suministro de calidad» a la población que ya vive y que, previsiblemente, aumentará en toda la aglomeración urbana con las nuevas áreas residenciales y proyectos empresariales que avalará el Potaus. Para dar salida a su producción, el documento recoge también las actuaciones que ya tienen previstas tanto Sevillana Endesa como Red Eléctrica Española en la zona: la construcción de seis nuevas subestaciones (en Albaida, Salteras, Gelves y dos en la capital); la ampliación de otras cinco (Guillena, Castilleja de Guzmán, Alcalá de Guadaíra y Sevilla); el cierre del anillo de 400 kilovatios por el suroeste y oeste del área metropolitana, la «repotenciación» de líneas de 220 kilovatios desde el norte, el oeste y el sur; y nuevas líneas de 220 kilovatios en la ciudad.