Aparte de la sostenibilidad, la lucha contra el cambio climático y la estabilidad de precios, la principal razón para pasarse a la biomasa es el ahorro. Las bajas temperaturas han llegado y las viviendas empiezan a programar sus calefacciones. Este año, nuevamente, los edificios equipados con instalaciones de biomasa notarán el ahorro respecto a los abastecidos con combustibles fósiles.
Astillas de biomasa
Los principales combustibles obtenidos a partir de la biomasa son leñas, astillas, pellets, huesos de aceituna y cáscaras de frutos. La leña de madera cortada y troceada, lista para utilizarse en los aparatos domésticos de combustión como estufas o chimeneas, es el producto menos elaborado de los cinco, y tradicionalmente se han empleado en viviendas unifamiliares.
Por lo general, sus dimensiones se encuentran entre los 15 y los 100 cms. Las astillas son el producto resultante de la trituración de la biomasa de origen leñoso, tanto agrícola como forestal, y tienen un tamaño variable en función del grado de trituración al que se hayan visto sometidas.
Para edificios de viviendas o servicios en los que se puede usar calefacción usando astillas, no hay rival: ahorros superiores al 65% si comparamos con lo que gastan los que usan gasóleo para calefacción o del 71% si usan gas natural. Son los últimos datos publicados para consumidores en Eurostatds, IDAE y AVEBIOM.
Pellets de madera
Los péllets son el producto más elaborado, y son pequeños cilindros de 6 a 12 mm de diámetro y de 10 a 30 mm de longitud hechos con serrín, astillas u otros residuos comprimidos que pueden utilizarse como combustibles. Los huesos de aceituna y las cáscaras de frutos, si bien usados en menores cantidades que las leñas, astillas y pellets, también suponen un combustible cada vez más empleado.
Si la calefacción es de pellets de madera, este otoño, el ahorro es el 36% frente a los que usan gas natural y del 22% frente a los que consumen gasóleo de calefacción para una vivienda de iguales características.
En resumen, con estos precios el consumidor de biomasa tiene muy fácil amortizar la diferencia del precio de la instalación de una caldera de biomasa frente al de una caldera de gas natural o gasóleo, que ni regaladas salen más económicas a medio y largo plazo para los consumidores.
Fuente: Javier Monforte / Energética21,
Artículo de referencia: http://www.energetica21.com/noticia/las-instalaciones-que-utilizan-astillas-de-biomasa-alcanzaran-ahorros-superiores-al-65porciento-este-invierno,