WWF ha analizado la situación del balance energético del mes de junio y subraya que la cobertura de la demanda ha sido del 22,% con energía nuclear, seguido del 18,9% con energía eólica, el 13,6% con energía hidráulica, el 12,6% cubierto con carbón, el 6,7% con ciclos combinados de gas natural, y el 26,2% restante con otras fuentes de energía (cogeneración, residuos y otras renovables). En régimen ordinario se ha generado el 54,9% de la electricidad, mientras que en régimen especial se ha producido el 45,1% restante.
Raquel García Monzón, Técnico de Energía de WWF España, afirma: “Desde WWF reclamamos un modelo energético 100% renovable para 2050. Un futuro energético sostenible y limpio, basado en el ahorro, la eficiencia y la generación renovable. Para ello es necesario la aprobación de una regulación adecuada para el autoconsumo como pilar de la generación distribuida, donde los ciudadanos sean el centro del sistema eléctrico y vivan en ciudades inteligentes que cuenten con edificios de cero emisiones de CO2, conectados a redes inteligentes (smartgrids) y con viviendas que puedan producir y consumir su propia energía en régimen de autoconsumo con balance neto.”
“La reforma energética prevista por el Gobierno debe contemplar esta demanda ciudadana, eliminando las actuales barreras para el acceso de cualquier consumidor al autoconsumo energético. También debe apostar definitivamente por un futuro energético libre de emisiones de gases de efecto invernadero, causantes del cambio climático”, asegura Raquel García Monzón.
Y añade: “Es necesario que la planificación energética española a largo plazo (horizonte 2030 y 2050) coincida con las Directivas Europeas en materia energética y climática para alcanzar un modelo energético sostenible y limpio. Debe plantear objetivos más ambiciosos de reducción de emisiones, desarrollo de renovables e incremento de la eficiencia energética, apostando de forma clara por la rehabilitación energética de edificios y cambios por una movilidad sostenible. El desafío energético que se plantea Europa contempla los objetivos a 2030 en el Libro Verde y apuesta de forma clara por reducir la elevada dependencia energética. Además, fomenta una economía baja en carbono que sea competitiva, prioriza la eficiencia energética y la mayor competencia del mercado eléctrico. A este respecto, debemos recordar que gracias a las renovables se baja el precio del pool.”
Según el Observatorio de la Electricidad de WWF, en junio de 2013 continúa disminuyendo la producción de electricidad: un 8,5% respecto al mismo mes del año pasado, hasta 22.350 GWh. También ha descendido la demanda eléctrica un 8,2%, situándose en 18.965 GWh.
En el mes de junio de 2013, según datos de REE, las energías de origen renovable han generado una producción total de 9.282 GWh. La energía eólica se sitúa en el segundo puesto del mix, con una contribución del 18,9% y 3.893 GWh. La principal ventaja de estas tecnologías limpias es que se trata de fuentes renovables autóctonas, que no emiten emisiones de gases de efecto invernadero, por lo que combaten el cambio climático, y al mismo tiempo reducen nuestra dependencia energética exterior y evitan la compra de derechos de emisión de CO2.
Los valores de las emisiones específicas de dióxido de azufre (SO2) y óxidos de nitrógeno (NOx) registrados en junio han disminuido respecto a las registradas el año pasado (siendo 0,327 gr SO2 y 0,226 gr NOx por KWh producido), principalmente por la disminución de la generación eléctrica con carbón /12,6%) y por el aumento de las energías renovables, que no generan emisiones.
Las emisiones medias de CO2 en junio fueron de 146 kg de CO2/MWh generado, inferiores al valor medio registrado en el mismo mes de junio de 2012 (286 kg/MWh). También se ha producido un descenso de las emisiones totales de CO2 respecto a las de junio de 2012, pasando de 6.399.454 ton de CO2 en junio del año pasado a 3.002.732 ton CO2 este mes de junio.