El pasado 23 de enero tuvo lugar la celebración de la Jornada «Cambio Climático y economía circular: desafíos para el sector de la construcción», organizada por la Confederación Nacional de la Construcción y la Fundación Ciudad y celebrada en la sede de CEIM-Confederación Empresarial de Madrid- CEOE.
“Los combustibles fósiles se mantienen como la principal fuente de energía de la UE y todavía abastecen el 73% del consumo total. El campo de la edificación tiene que dirigirse hacia un modelo más sostenible y eficiente, apoyado en las renovables, para cambiar esta tendencia y reducir los efectos derivados del calentamiento global», señala Alexandre Díez Baumann, director general de Ampere Energy.
El uso de los combustibles fósiles supone un importante problema de sostenibilidad, tanto por motivos ambientales como económicos, pues se trata de recursos limitados y que pueden agotarse.
Tal y como se ha puesto de manifiesto en la jornada, en la actualidad no sólo podemos almacenar gran cantidad de energía en un mínimo espacio gracias a las baterías de ión-litio, sino también utilizar la inteligencia artificial para optimizar las fuentes renovables y gestionar el consumo de forma eficiente.
Precisamente, “gracias al almacenamiento energético y al autoconsumo, muy pronto la mayor parte de la producción de energía mundial será descentralizada y cada usuario producirá su propia energía”, pronostica el director general de Ampere Energy. Un hecho que tendrá especial relevancia en el sector de la edificación, ya que los edificios son los responsables de más del 40% del consumo de energía.
A ello, se añade la necesidad de adaptar el mercado de la construcción a las actuales demandas de los consumidores, en sintonía con el medio ambiente y el autoconsumo. No en vano, el 20% de los futuros compradores buscan viviendas comprometidas con el medio ambiente.