Los estudios realizados por el Observatorio de Energía de Fundación Repsol concluyen que la eficiencia energética en España ha experimentado una mejora sostenida desde el año 2000, con un incremento de 15 puntos entre 2000 y 2012. Esta mejora se ha visto reflejada en la evolución positiva de los sectores con mayor peso en el consumo energético: transporte, industria, residencial y servicios.
La crisis económica, sin embargo, también ha afectado a la evolución del Índice Repsol de Eficiencia Energética que, por primera vez desde 2002, mostró una ligera reducción de la eficiencia en el año 2010, recuperando la tendencia de mejora en 2011 y 2012.
En cuanto a la evolución sectorial de la eficiencia, el Informe recoge que en 2011 y 2012 los principales sectores consumidores de energía en España mostraron un comportamiento desigual: la eficiencia energética aumentó en la industria y el transporte respecto a 2010, mientras que disminuyó en el sector residencial y se mantuvo constante en el sector servicios. La industria y el transporte, que suponen casi el 70% del consumo de energía, son dominantes para establecer la tendencia general.
El contexto energético mundial en 2011 y 2012 ha estado marcado por el crecimiento de la demanda de energía primaria y del consumo de energía final. Los combustibles fósiles siguen representando más del 80% de la demanda mundial de energía primaria, incrementándose la demanda mundial de todos ellos. Por su parte, las renovables y el gas natural destacaron por el crecimiento significativo de su consumo. En cuanto a la dimensión geográfica de la demanda energética, se mantienen las diferencias de crecimiento, tanto económico como energético, entre los países desarrollados y los emergentes. Los países de la OCDE reducen su demanda energética y muestran un estancamiento o leve crecimiento económico, mientras que los países en desarrollo han experimentado un fuerte crecimiento de la demanda de energía, ligado a un importante crecimiento económico.
Mejora de 20 puntos en la intensidad de emisiones de gases de efecto invernadero
El Índice Repsol de Intensidad de Emisiones, que muestra las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) asociadas al consumo de energía en España, ha registrado entre 2000 y 2012 una reducción de 20 puntos. Sin embargo, en el período 2011-2012 se ha producido un leve aumento del mismo, rompiendo la tendencia de mejora observada desde la década anterior. Esto se ha debido al mayor peso del carbón en la generación eléctrica, que pasó del 13% en 2010 a un 20% en 2011.
En todos los sectores se produjo un aumento de la intensidad de emisiones, con la excepción del transporte, que además de sumar la contribución de los biocombustibles, sólo se ve muy ligeramente afectado por el aumento de emisiones en la generación de electricidad.
España y la UE-15
Según el estudio de Fundación Repsol, que permite seguir la evolución de los índices en España respecto a la media de los países de la UE-15, la convergencia iniciada en años anteriores se ha visto interrumpida en 2011, puesto que la eficiencia aumentó en mayor medida en la UE que en España. A nivel global, España se encuentra 11 puntos por debajo de la UE-15, si bien existen importantes diferencias por sector. Nuestro país está alineado con la media de la Unión Europea en el sector residencial y es superior a ella en el sector servicios.
En intensidad de emisiones, en 2011 España se situó 17 puntos por encima de la media de la UE-15.
Evolución prevista hasta 2025
El estudio incorpora proyecciones sobre la evolución del consumo energético en España y de los Índices Repsol de Eficiencia Energética y de Intensidad de Emisiones hasta 2025, sobre la base de las previsiones macroeconómicas representadas por tres escenarios de crecimiento: bajo, base y alto, así como la implantación de políticas energéticas adoptadas. En un escenario continuista, las tasas de mejora serán significativamente menores a las históricas.
En materia de eficiencia energética, se prevé una tasa de mejora del 0,2% anual entre 2011 y 2025, frente al 1,3% en 2005-2011. En cuanto al Índice de intensidad de emisiones, de acuerdo con las estimaciones realizadas, experimentará una tasa de reducción anual del 0,3% frente al 2,8% registrado entre 2005 y 2011.
Estas mejoras están asociadas principalmente a la reducción del carbón y al mayor peso de las energías renovables en el mix de generación eléctrica.
El estudio señala que aumentar de forma significativa las tasas de mejora de la eficiencia energética en España requerirá impulsar nuevas acciones sobre la demanda, y que mejoras adicionales de la intensidad de emisiones de GEI deberán venir asociadas a una mayor eficiencia energética.
En este sentido, se proponen algunas acciones clave para llevar a cabo en los sectores del transporte, residencial, servicios, industria y transformación, y su posible impacto en la mejora de ambos índices.
Sobre el Observatorio de Energía
Fundación Repsol, a través de su Observatorio de Energía, muestra su compromiso de contribuir al desarrollo de un modelo energético más sostenible y competitivo, y a un uso más racional y eficiente de la energía. El Observatorio aporta instrumentos de medida y análisis que permiten la evaluación y seguimiento de políticas destinadas tanto a la mejora de la eficiencia energética como a la reducción de las emisiones de GEI.
Además, la Fundación, mediante el Fondo de Emprendedores, desarrolla iniciativas en el ámbito del emprendimiento que puedan propiciar un desarrollo económico y energético más sostenible, impulsando el conocimiento, la investigación y la innovación.