El estudio «The Race to Replace: the economics of using renewables to free Europe from Russian gas» realizado por la Universidad de Oxford muestra que la Unión Europea (UE) podría sustituir el gas ruso por energías renovables en el año 2028. Este informe analiza cuánto nos costarán las energías renovables para reemplazar el gas ruso en Europa.
La invasión de Rusia en Ucrania originó una crisis energética a nivel mundial. Por ello, la Unión Europea (UE) se puso manos a la obra para elaborar medidas de emergencia que eliminen la dependencia energética para obtener gas ruso hasta el año 2028. Y la solución pasa por las energías renovables y recuperar las inversiones realizadas, donde también indica que España podría eliminar poco a poco el gas ruso sin necesidad de utilizar la energía eólica marina.
Según afirman los autores de este estudio, la inversión total para sustituir el gas ruso alcanzaría la cifra de 811.000 millones de euros. Esta cantidad se dividirá en dos grandes bloques: 706.000 millones de euros en energías renovables y 105.000 millones de euros en bombas de calor. Los autores de este estudio calculan que hasta el 90% de la inversión adicional necesaria podría eliminar gradualmente la necesidad de comprar gas de aquí a 30 años.
¿Qué son las energías renovables? ¿Cuáles son las más importantes para realizar esta transición energética?
Las energías renovables se obtienen a partir de fuentes naturales virtualmente inagotables como el agua, la biomasa animal o vegetal, el sol o el viento -entre otras-. La principal ventaja es que no utilizan combustibles fósiles, sino recursos capaces de renovarse ilimitadamente.
La transición energética es la llave que necesitamos para hacer frente a la crisis energética y climática a nivel mundial. Las preocupaciones por la seguridad energética, los altos precios de los combustibles fósiles y la urgencia del cambio climático subrayan la necesidad de avanzar más rápido hacia un sistema de energías limpias.
La energía eólica, junto con la energía solar, son las energías renovables que más se utilizan en todos los países del mundo. Además, ambas se plantean como una de las principales soluciones para acelerar la transición energética y lograr el ansiado objetivo de la descarbonización mundial. El uso de la la energía eólica y la energía solar, energías del futuro pero también del presente, supone grandes beneficios para el mundo en su lucha contra la emergencia climática.
La energía eólica es una fuente de energía renovable que se obtiene a partir de la energía que producen los aerogeneradores o las turbinas eólicas gracias a la fuerza del viento, convirtiendo la energía cinética del viento en energía eléctrica. Es la más eficiente de todas las energías renovables, cuyo impacto ambiental es muy bajo si la comparamos con el resto de energías.
La energía solar es una fuente de energía renovable que se obtiene a partir de la radiación electromagnética que generan los rayos del Sol. El Sol es una de las principales fuentes naturales de energía virtualmente inagotables que se usan para la generación de electricidad renovable.
Ayudas para realizar la transición energética
El nuevo estudio del Grupo de Finanzas Sostenibles de la Universidad de Oxford (Oxford Sustainable Finance Group) refleja los costes que supondría sustituir el gas ruso por energías renovables para comenzar una nueva era de la generación eléctrica. Además, insta a los gobiernos para que realicen políticas específicas que muestren su apoyo a los inversores mediante la mejora de subastas de energía solar y eólica a gran escala.
Gireesh Shirimali, coautor del informe y director de «Transition Finance Research del Oxford Sustainable Finance Group», indica lo siguiente respecto a esta transición:
Además, añade que en lugar de recurrir a las importaciones de combustibles fósiles, la Unión Europea (UE) tendría una mayor seguridad energética y estaría más cerca de lograr su ansiado objetivo de alcanzar las cero emisiones netas de dióxido de carbono (CO2):
Fuentes: Redacción Ambientum, Energías-Renovables, El Periódico de la Energía