La Comisión desvela los resultados de esta encuesta en la víspera de su primera reunión plenaria que tiene lugar en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
El 85% de los encuestados están de acuerdo con el hecho de que “a la hora de decidir sobre la utilización y la regulación de las aguas internacionales del océano, los gobiernos deben tener en cuenta las necesidades de las generaciones futuras”. Sólo el 5% se declara en desacuerdo.
Según Trevor Manuel, Ministro de la Presidencia Sudafricano y Copresidente de la Comisión Océano Mundial, “los resultados demuestran que las poblaciones del mundo se sienten comprometidas con el futuro de su océano y de los beneficios que aporta”.
“El objetivo de la Comisión es establecer una hoja de ruta para que el océano alcance a ser productivo de una forma sostenible lo antes posible. La encuesta sugiere que la población mundial está a favor de ello”.
La encuesta también indica que la gente reconoce la importancia del océano para la vida. A la pregunta ¿qué proporción de oxígeno que se respira proviene del océano?, los encuestados estimaron una media del 43%, cerca del dato científico, de 50% aproximadamente.
“Todos dependemos del océano mundial, y la gente entiende esto muy bien. No sólo es motivante, sino que justifica que es el momento adecuado para el trabajo que vamos a llevar a cabo”, según José María Figueres, expresidente de Costa Rica y Copresidente de Comisión Océano Mundial.
“Lamentablemente, la evidencia científica demuestra que las presiones sobre el océano son crecientes, con un tercio de las pesqueríasexplotadas por encima de sus niveles límite y con las emisiones de carbono acidificando las aguas. Estos son temas que debemos de abordar si queremos que nuestros hijos y nietos obtengan los mismos beneficios que los de nuestra generación”.
La encuesta indica que las personas saben que “la alta mar” constituye la mayor parte del océano mundial. De media, los encuestados han estimado que el 54% del océano corresponde a la alta mar, lo que se acerca a la figura real, el 65% aproximadamente.
Sin embargo, más información sobre temas que afectan a la alta mar es claramente necesaria: tan sólo el 15% de las personas han estado de acuerdo con la afirmación “me siento correctamente informado sobre los temas relacionados con la alta mar, la zona internacional del océano”, mientras que un 62% se han declarado en desacuerdo. En India e Indonesia, casi un tercio de la gente se siente bien informada, mientras que en Francia y Japón la proporción tan sólo alcanza el 4%.
La Comisión
Lanzada el pasado mes, la Comisión Océano Mundial agrupa a personalidades políticas de renombre del mundo entero, junto con líderes del mundo de los negocios, de la economía, del desarrollo y del derecho.
La Comisión analizará las amenazas, los desafíos y las oportunidades que se le presentan a la alta mar, y desarrollará recomendaciones pragmáticas y rentables que, en caso de ser implementadas, puedan frenar la degradación del océano mundial y restaurar su salud y productividad. La Comisión publicará sus recomendaciones finales en la primera mitad del 2014, poco antes de que la Asamblea General de las Naciones Unidas empiece su debate sobre la protección de la biodiversidad en alta mar, compromiso adquirido en la cumbre de Rio+20 el año pasado.