Poco después de sus recomendaciones de cara a un crecimiento a corto plazo, en las que se hacía hincapié en la necesidad de garantizar no solo el crecimiento de hoy, sino también el de mañana, la Comisión ha formulado propuestas encaminadas a proteger la naturaleza, estimular el crecimiento sostenible, crear nuevos puestos de trabajo y poner a Europa en el camino de la prosperidad y la salud, respetando los límites del planeta.
La responsabilidad de alcanzar los objetivos del programa la comparten la UE y sus Estados miembros. Entre las medidas concretas que han de tomarse se cuentan la supresión progresiva de las subvenciones perjudiciales para el medio ambiente, un desplazamiento de la presión fiscal del trabajo a la contaminación, la elaboración de acuerdos de asociación entre los Estados miembros y la Comisión sobre la aplicación del Derecho ambiental de la UE y la creación de un sistema de seguimiento de los gastos relacionados con el medio ambiente en el presupuesto de la UE.
Janez Potočnik, comisario de Medio Ambiente, ha declarado que “el nuevo programa define el camino para que Europa se convierta en un lugar en que las personas vivan en un medio ambiente seguro y saludable, en que el progreso económico se funda en una economía ecológica y sostenible y se haya alcanzado la capacidad de recuperación ecológica”.
Connie Hedegaard, comisaria de Acción por el Clima, remarcó además que “no podemos esperar hasta que acabe la crisis económica para abordar las crisis de los recursos, el medio ambiente y el clima. Debemos abordar todas estas crisis al mismo tiempo, por lo que debemos integrar las consideraciones medioambientales y climáticas en todas las políticas. Esta estrategia ofrece a las empresas y a los responsables políticos una visión a largo plazo muy necesaria para la transición hacia una sociedad sostenible e hipocarbónica en Europa”.
Un programa de acción
En el programa, la Comisión determina nueve objetivos prioritarios, algunos de los cuales son los siguientes:
- Proteger la naturaleza y consolidar la capacidad de recuperación ecológica.
- Impulsar un crecimiento sostenible, hipocarbónico y eficiente en el uso de los recursos.
- Abordar con eficacia los peligros para la salud relacionados con el medio ambiente.
El programa establece un marco para apoyar la consecución de estos objetivos mediante, entre otras cosas, la mejora de la aplicación del Derecho de la UE en materia de medio ambiente, la ciencia más avanzada, la garantía de las inversiones necesarias en apoyo de las políticas de medio ambiente y cambio climático y la mejora de la forma en que las consideraciones y requisitos medioambientales se recogen en otras políticas.
El programa también persigue estimular los esfuerzos encaminados a contribuir a que las ciudades de la UE sean más sostenibles y a mejorar la capacidad de la UE para hacer frente a los retos regionales y mundiales en materia de medio ambiente y cambio climático.
Próximas etapas
La propuesta de la Comisión será examinada por el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea. Una vez aprobada, el nuevo Programa de Medio Ambiente se convertirá en legislación de la UE.
Antecedentes
El programa propuesto, el séptimo de este tipo, se basa en los importantes logros de cuarenta años de política medioambiental de la UE y en una serie de iniciativas estratégicas recientes en el ámbito del medio ambiente y la eficiencia en el uso de los recursos, tales como la Hoja de ruta hacia una Europa eficiente en el uso de los recursos , la Estrategia de la UE sobre la biodiversidad hasta 2020 y la Hoja de ruta hacia una economía hipocarbónica. Debe garantizar el compromiso de las instituciones de la UE, los Estados miembros, las administraciones locales y regionales y otras partes interesadas con un programa común de actuaciones de política medioambiental hasta 2020.
Los programas generales de acción en materia de medio ambiente han orientado la evolución de la política medioambiental de la UE desde principios de la década de 1970. El sexto programa de acción en materia de medio ambiente de la UE abarcó el periodo comprendido entre 2002 y 2012.
Mientras que muchos Estados miembros de la UE tienen grandes dificultades para hacer frente a la crisis económica, la consiguiente necesidad de reformas estructurales ofrece nuevas oportunidades para la UE para avanzar rápidamente hacia una sostenibilidad mayor. El nuevo programa de acción en materia de medio ambiente indica el camino para sacar el máximo provecho de esas oportunidades.