Los incendios forestales tienen un gran impacto en los ecosistemas terrestres por todo el mundo. La interacción del tiempo, la vegetación y el uso del suelo provoca este tipo de incendios, lo que hace que sean muy sensibles a los cambios. Por ello resulta importante comprender los mecanismos que controlan los regímenes de incendios forestales y mejorar las predicciones de cuándo y cómo van a cambiar.
Los científicos, pertenecientes al Centro Helmholtz de Investigación sobre el Medio Ambiente (UFZ) en Alemania y a la Universidad de Michigan en los Estados Unidos, utilizaron un modelo de mínimos de dinámica de incendios que describe la propagación del fuego como un “proceso estocástico de nacimiento y muerte”. Esta propagación del fuego es similar a la propagación de una epidemia.
Utilizando este modelo, los investigadores replicaron patrones regionales múltiples en regímenes de incendios, lo que les permitió clasificar las diferentes regiones en función de su proximidad a un umbral crítico. Los socios de PATRES evaluaron las series temporales de los grandes incendios de las Llanuras Boreales de Canadá, que han pasado de tener un régimen subcrítico a un régimen crítico.
Los investigadores creen que grandes regiones boscosas de Canadá están en la antesala de que se produzca un cambio rápido y que debido al cambio climático podrían incluso superar el valor umbral. Los científicos opinan que hay que reconsiderar las estrategias de lucha contra los incendios forestales en amplias zonas de Canadá.
“Los cambios en los regímenes de incendios forestales tienen repercusiones importantes a escala local y mundial, y por lo tanto también afectan al clima”, explicó el Dr. Volker Grimm de la UFZ. “Por consiguiente, es importante entender cómo funcionan los mecanismos que determinan estos incendios de cara a poder hacer predicciones sobre lo que va a cambiar en el futuro”.
La provincia canadiense de Columbia Británica sufrió pérdidas importantes en 2009, cuando se incendiaron alrededor de 1.000 hectáreas de bosque y matorral. Más de 10.000 personas tuvieron que ser evacuadas de la zona. Los expertos creen que este tipo de fenómenos no harán más que aumentar. La bibliografía también presenta teorías similares y, en particular, hace hincapié en que el cambio climático podría desencadenar un drástico incremento de la amenaza de incendios forestales en el Parque Nacional de Yellowstone (Estados Unidos). Algunos piensan que los bosques de dicha zona incluso podrían desaparecer en este siglo.
Los socios de PATRES analizaron datos recopilados por el Servicio Forestal Canadiense, que registra los incendios que abarcaron superficies superiores a doscientas hectáreas entre 1959 y 1999, y los ordenaron por ecozonas. Los investigadores identificaron tres de estas zonas ecológicas de Canadá que están cerca de un punto de inflexión: el Escudo Boreal, las Llanuras Boreales y las Llanuras de Hudson, al sur de la Bahía de Hudson. Según los científicos, el Escudo Boreal es la ecozona que más cerca está del punto de inflexión.
Cuando evaluaron los incendios en estas zonas descubrieron que su tamaño medio se había triplicado rápidamente. "En nuestra opinión, esta es una señal de que también existen valores umbral para los bosques, por encima de los cuales el régimen de incendios cambia drásticamente", afirmó el Dr. Grimm. “Es probable que las llanuras boreales hayan experimentado en las últimas décadas, particularmente en torno a 1980, un cambio hacia un sistema caracterizado por los incendios forestales. Esto tiene repercusiones fundamentales para el medio ambiente y la lucha contra los incendios forestales. Pequeños cambios en los parámetros de propagación del fuego tienen un gran efecto en el tamaño de los incendios”, concluyó.