Este miércoles 25 de Junio a las 9 AM, en la casa de la cultura de la Florida, el concejo municipal votará la propuesta de Plan Regulador para la precordillera del alcalde Rodolfo Carter. Lo que pretende es subdividir el territorio en parcelas de una hectárea y permitir la construcción de equipamiento urbano destinado al comercio y al esparcimiento privado.
De triunfar la propuesta de Carter, se podrían construir gimnasios, canchas deportivas, piscinas, tiendas comerciales, y cafeterías, todo esto con sus respectivas calles, estacionamientos, tendido eléctrico y red de alcantarillado. Estos proyectos inmobiliarios no tendrían ninguna dificultad legal para destruir las zonas vitales del bosque nativo, lo que echaría por tierra el sueño de los vecinos de convertir el Panul en un Parque Comunitario para el contaminado Santiago.
La propuesta de Carter es rechazada por diversas organizaciones sociales de La Florida, ya que es resultado de un proceso viciado y oscuro que cerró las puertas a la participación de la comunidad.
Una de las irregularidades cometidas por la municipalidad fue dar instrucciones directas al profesional encargado de hacer los estudios técnicos (el geógrafo Francisco Ferrando), para que no considerara el valor ambiental del bosque nativo, sino que sólo se enfocara en determinar si existe riesgo de aluviones e inundaciones en el sector. Como resultado, se restringirá la construcción de viviendas, quedando el camino libre para otro tipo de proyectos igual de destructores.
Ante la compleja situación ambiental que vive nuestra comuna, llamamos con urgencia a todas las organizaciones sociales y ambientales de La Florida, a movilizarnos para levantar un trabajo común que nos permita detener las atroces acciones municipales en contra de nuestro medio ambiente, como la masacre de árboles nativos que hemos visto en nuestros barrios, la dramática reducción de áreas verdes y la continua privatización de espacios comunes, en una comuna golpeada desde hace décadas por la planificación urbana entregada al mercado inmobiliario y al mal gobierno.
Instamos nuevamente a las autoridades de gobierno a apoyar a los vecinos en la exigencia de que el Panul debe ser expropiado y protegido de manera oficial. A los vecinos decimos que la tarea más difícil, pero la única que vale la pena, es comenzar a trabajar hoy mismo para cuidar nuestro bosque nativo y hacer justicia ambiental por nuestras propias manos, porque nadie nos va a regalar nada, porque el parque comunitario somos nosotros.