El proyecto fue respaldado por el Gobierno de Navarra con una Declaración de Impacto Ambiental favorable a pesar de los informes técnicos contundentemente negativos emitidos por sus propios Servicios Técnicos medioambientales.
El proyecto no ha recibido las autorizaciones necesarias para su puesta en marcha ante lo que MAGNA presiona a la Administración para que le otorgue los salvoconductos que le permitan quebrantar las protecciones legales con que cuentan estos territorios.
En estas circunstancias, desde SEO/BirdLife nos vemos en la necesidad de aclarar algunas cuestiones:
– Las dilaciones administrativas que MAGNA achaca a la Confederación Hidrográfica del Ebro son de su entera responsabilidad que por supuesto comparte con los responsables de la gestión medioambiental de la Comunidad Autónoma. Recordemos que el Gobierno de Navarra acordó la tramitación de un Proyecto Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS) y desde el principio puso como condición la de que el promotor minero debería proveerse de un informe previo favorable de la Confederación Hidrográfica del Ebro que respaldara su proyecto. Este permiso nunca se solicitó y, en consecuencia, la CHE no lo otorgó. Para solucionar esta anomalía el promotor minero se ve obligado a solicitar las autorizaciones para las distintas fases del proyecto dando pie a la apertura de ocho expedientes parciales, alegados por SEO/BirdLife, que complican todo el trámite administrativo. Así que los retrasos burocráticos deben achacarse a la torpeza y prepotencia del promotor minero.
– El proyecto es ilegal y totalmente incompatible con la conservación del territorio, lo que nos ha obligado a plantear una demanda que actualmente instruye la Sala de lo Contencioso del TSJN. Este litigio también está sufriendo retrasos por la negativa del Gobierno de Navarra a entregar a los jueces algunos informes que al parecer le perjudican.
– MAGNA sabe sobradamente que la mina actual no está agotada al haber comprobado que la cantera Azkarate, en Eugui, tiene mineral de muy buena calidad para varias decenas de años más. Recordemos que en noviembre del 2012 MAGNA recibió una autorización para comenzar una campaña de sondeos de investigación minera en la mina actual en una zona donde es conocida la presencia de mineral de buena calidad. El resultado de esta exploración geológica fue positivo mostrando buena calidad de mineral y en cantidad suficiente para muchos años de explotación fuera de la Red Natura.Insistimos en la información facilitada por la propia promotora minera cuando admite que el mineral de Zilbeti es escaso y de baja calidad. Por tanto, las inversiones necesarias para explotarlo son de difícil justificación.
– Como bien declara el responsable y portavoz de MAGNA, a la empresa no le interesa la mina de Zilbeti, lo que persigue es la concesión minera que rompa la protección legal de la Red Natura 2000 y le permita potenciar su actividad en Baztan, que es donde tiene el mineral que le interesa y que tuvo que abandonar por la repulsa social que provoca su actividad.
Por otra parte MAGNA debe entender que la jurisprudencia europea nos ampara y que nunca conseguirá una sentencia firme para desarrollar la mina en una Zona de Especial Conservación como la de Monte Alduide, por lo que, para no poner en riesgo las inversiones de sus accionistas, le invitamos a que dirija sus esfuerzos en la búsqueda de recursos minerales y alternativas industriales compatibles con la legislación nacional vigente y las directivas europeas.
No podemos apoyarnos en la crisis económica que sufrimos para superarla con propuestas que obliguen a violar la Ley. Todo lo contrario: Debemos ser capaces de diseñar un futuro en el que el desarrollo de riqueza y de bienestar social sean posibles sin necesidad de destruir nuestro territorio, nuestros paisajes y la biodiversidad que contienen. Justamente estamos anclados en una crisis de dimensiones desconocidas por haber seguido modelos de desarrollo como el que MAGNA y el Gobierno de Navarra nos proponen.