La estación lluviosa, que ha llegado este año a China más pronto de lo habitual, ha causado con sus inundaciones 252 muertos y 64 desaparecidos desde principio de junio en el país, según los últimos datos oficiales.
De acuerdo con la agencia oficial Xinhua, que cita fuentes de la oficina nacional para el control de inundaciones y sequías, en el último mes se han visto afectados por las lluvias 50 millones de personas. Se calcula que 200.000 casas han sido destruidas y se han malogrado 3 millones de hectáreas de campos de cultivo.
"Las labores de asistencia se verán dificultadas porque se espera un nivel mayor de lluvias de lo habitual en las áreas del Río Amarillo, partes de las provincias nororientales así como en la zona del suroeste de China afectada por el terremoto", declaró Zhang Zhitong, subdirector de la oficina.
El responsable aseguró que se están reforzando las medidas ante esta estación de lluvias y tifones, pero que regiones como las del delta del Río de la Perla están sufriendo las peores inundaciones en más de cinco décadas.
Media China se está viendo afectada por un nuevo temporal, que ha dejado de momento un balance de un muerto y cuatro heridos en Shanghai (todos ellos obreros de la construcción en un edificio que se vino abajo ayer).