Reserva marina de las islas Medes
Un equipo formado por investigadores de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad de la Universidad de Barcelona (IRBio), junto con personal del Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Baix Ter, y el Grupo de Actuaciones Especiales de los Bomberos de la Generalitat (GRAE), ha podido recuperar este septiembre una red de pesca abandonada dentro de la Reserva Marina de las Islas Medes (Girona).
El primer aviso de la localización de la red lo dio un instructor de un centro de inmersión de L’Estartit (Girona). En concreto, la red recuperada del fondo marino es un arte de cerco de unos 200 metros de largo y de un peso considerable, que estaba depositada sobre un fondo de arena, cantos rodados y algunas rocas. Con los datos aportados por el instructor, y de acuerdo con el grado de epibiosis (organismos incrustados) que muestra la red, se calcula que estaba en el fondo marino desde hace un par de años. Antes de retirarla, los expertos la inspeccionaron para cuantificar el impacto que podía tener sobre el fondo marino, además de detectar y liberar las especies que había enredadas en ella. A continuación, se despegó del fondo con cuidado para evitar la erosión y para proteger las especies marinas durante el proceso de extracción. Debido a las grandes dimensiones y el peso elevado de este arte de pesca, los miembros del GRAE la tuvieron que retirar en dos fases con la ayuda de globos de aire.
Según los expertos, aunque los efectos erosivos de la red sobre las rocas a la que había estado ligada estos años son considerables, el tramo que quedó sobre el fondo detrítico —que fue la mayor parte— no causó ningún impacto importante.
Evitando la pesca fantasma
Este hallazgo evidencia que se realiza, o bien se ha realizado, pesca de cerco de forma ilegal dentro del perímetro de la reserva marina. Los resultados del programa de seguimiento de la biodiversidad marina del parque indican una disminución de algunas especies comerciales, como la dorada, y se sospechaba que la causa era la pesca de cerco. El hecho de encontrar esta red parece confirmar esa hipótesis.
Esta actuación se enmarca dentro del proyecto «Evitemos la pesca fantasma», que comenzó en el año 2015 en el Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Baix Ter, para retirar de los fondos marinos las redes y artes de pesca abandonadas, tanto artesanales como deportivas, y evitar así que tengan impacto sobre las especies y los ecosistemas bentónicos.
El proyecto es una iniciativa de investigadores del Grupo de Investigación Consolidado MedRecover de la Universidad de Barcelona, coordinados por el profesor Bernat Hereu, del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales y de la IRBio, con la colaboración del Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Baix Ter, y la cofradía de pescadores de L’Estartit.