Con cero emisiones directas, el coche eléctrico es una alternativa muy apropiada para las ciudades. En Madrid, desde hace años, se viene apostando por las alternativas al vehículo diésel y por la diversificación energética, combinando diferentes combustibles como el Gas Natural Comprimido, el Autogas -gas licuado de petróleo o el bioetanol, y por tecnologías como la de los vehículos híbridos y 100 por 100 eléctricos.

En estos momentos, la flota municipal ya cuenta con 1.716 vehículos que cumplen con los requisitos para ser considerados como flota verde, "una cifra que representa casi el 40% del total y que nos proponemos continuar elevando progresivamente". Y dentro de este porcentaje, se encuentran 185 vehículos híbridos, entre ellos los asignados a los concejales delegados de la Junta de Gobierno o los 53 coches de la Policía Municipal, y 100 vehículos totalmente eléctricos, 20 microbuses eléctricos de la EMT que dan servicio en la zona centro y 80 vehículos eléctricos empleados en la conservación de zonas verdes.

Tecnologías limpias

Además de renovar su propia flota, el Ayuntamiento de Madrid también trabaja para que los combustibles y las tecnologías limpias se conviertan en una alternativa real y accesible. "Para ello, estamos dando pasos importantes en la creación de una red de suministro alternativo, que próximamente alcanzará 31 puntos de repostaje de combustibles menos contaminantes, y que hoy ya dispone de un total de 269 puntos de recarga eléctrica".

Al mismo tiempo se ponen en marcha iniciativas para estimular la demanda privada de vehículos alternativos. "En este sentido, hemos orientado la política fiscal del Ayuntamiento sobre los vehículos, especialmente centrada en favorecer la tecnología eléctrica y hemos establecido la máxima bonificación -el 75%- del conocido como impuesto de circulación  para los vehículos híbridos y eléctricos, y para estos últimos, la exención en el pago y la limitación horaria del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER)".

También se han puesto en marcha iniciativas como el Foro pro Clima Madrid, al que ya se han unido más de 50 empresas líderes, que están llevando adelante renovaciones sustanciales de sus flotas. Y se han establecido convenios con empresas energéticas y del sector del taxi para fomentar el uso de combustibles y tecnologías alternativas en este sector, en el que el número de vehículos híbridos ya alcanza prácticamente el 6% de la flota. "Si a ello le sumamos los taxis que utilizan gas podemos decir que ya más del 10% de la flota del taxi se mueve con combustibles alternativos menos contaminantes".

Ahorro y eficiencia energética

Ana Botella aprovechó la ocasión para recordar que es en el ahorro y la eficiencia energética, "donde las ciudades podemos desempeñar un papel especialmente relevante", Madrid vuelve a destacar, ya que su consumo per cápita de energía es un 40% menor que la media nacional y su intensidad energética -cantidad de energía producida por unidad de PIB generada-, un 65% inferior, según datos aportados por la delegada.



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