El Parlamento Europeo aprobó este martes una nueva norma que prohíbe la venta de vehículos diésel y gasolina en el año 2035. La Comisión Europea presentó la propuesta de esta normativa en julio del año 2021, un proyecto que derivó en intensas negociaciones entre los distintos agentes del Parlamento Europeo.
El futuro del sector automovilístico será 100% eléctrico dentro de poco más de una década. Europa quiere implantar los coches eléctricos a partir del año 2035, mientras que en el resto de países mundiales lo harán unos años más tarde, donde los Estados Miembros de las Naciones Unidas alcanzaron un acuerdo en la ya clausurada COP27 para prohibir la venta de vehículos de combustión a partir del año 2040.
Ahora, el Consejo Europeo tendrá que aprobar de manera formal el texto para que pueda entrar en vigor. Los fabricantes de vehículos tienen que reducir las emisiones de los vehículos que vendan a partir del año 2030 a la mitad de las emisiones del año 2021. Es decir, el objetivo es reducir las emisiones de los vehículos de venta nueva un 55%.
Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europea, detalla que esto supone una gran victoria para la movilidad eléctrica:
¿Qué es la movilidad eléctrica?
La movilidad eléctrica esta compuesta por aquellos vehículos que usan motores eléctricos para generar la locomoción, reduciendo la huella de carbono en las ciudades e incentivando el uso de la movilidad sostenible. Es el futuro de la movilidad urbana, ya que ayuda a mitigar los efectos del cambio climático y evita las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a la atmósfera, mejorando así la calidad del aire de nuestras ciudades.
Los vehículos eléctricos suponen grandes beneficios para el medio ambiente. Permiten reducir el consumo de combustibles fósiles gracias a una mayor eficiencia energética de su tecnología. Son los únicos medios de transporte que no emiten dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, ya que no contaminan en su conducción y mejoran la calidad del aire que respiramos día a día en las ciudades.
Las ventas de estos vehículos eléctricos han contribuido a limpiar la atmósfera, eliminando más de 150 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) cada año. Este dato supone una pequeña victoria para la transición energética, es una muestra de que estamos un pasito más cerca de conseguir el tan ansiado objetivo de la neutralidad de carbono.
Reformar el reglamento comunitario sobre emisiones de CO2 en vehículos
El texto destinado a cumplir los objetivos climáticos europeos, en el cual el Partido Popular Europeo (PPE) -grupo mayoritario del pleno- mostró su oposición, se aprobó con 340 votos a favor, 279 votos en contra y 21 abstenciones. Este texto tiene el objetivo de disminuir a cero las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos nuevos en Europa a partir del año 2035.
La nueva normativa reajusta el porcentaje de ventas de vehículos de bajas o cero emisiones que la Unión Europea (UE) demanda a los fabricantes de vehículos para que puedan acogerse a los incentivos económicos que ofrece la Comisión Europea (CE).
Frans Timmermans se mostró muy satisfecho con esta nueva reforma, afirmando lo siguiente:
Fuentes: Redacción Ambientum, EFE VERDE