Con la "Guía básica de actuación en movilidad sostenible a los centros de trabajo", el sindicato busca sensibilizar y, a la vez, dotar a los representantes sindicales de herramientas útiles para que en la negociación colectiva se introduzca el valor de gestionar una movilidad sostenible a los centros de trabajo.
La pretensión final del documento es que el transporte de trabajadores a las empresas forme parte, en una época de crisis económica, de los beneficios sociales, económicos y ambientales que puedan obtener empleados y empresarios y, por ampliación, la sociedad en su conjunto.
Entre otras cosas, la guía recomienda el transporte colectivo, el uso del coche compartido, los desplazamientos a pie o en bicicleta cuando sea posible, el pago del título de transporte al personal, cuyo gasto está bonificado en las declaraciones de impuestos, y la creación de comisiones de medio ambiente como órgano de representación dentro de las empresas.
Para Francisco Cabezos, secretario de Medio Ambiente de FSC-CCOO, la gestión de la movilidad al trabajo "ha de constituir una parte más de la negociación porque mejora la calidad de vida y, económicamente, supone un ahorro y una inversión a largo plazo". Además, ha añadido que "un país como el nuestro, que gasta del orden de 40.000 millones de euros al año en la compra de hidrocarburos, ha de plantearse seriamente un cambio en el modelo de movilidad y por supuesto en el modelo energético".