Este convenio de colaboración firmado con 10 ayuntamientos: Aranda de Duero, Laguna de Duero, Medina del Campo, Miranda de Ebro, Palencia, Ponferrada, Salamanca, San Andrés del Rabanedo, Soria y Valladolid para la realización de acciones encaminadas a mejorar la recogida y gestión del aceite usado vegetal de origen domiciliario, que supone una inversión de 230.800 euros, de los cuales el 50% son financiados por la Junta de Castilla y León.
El EREN, en coordinación con el Servicio de Educación Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente, pondrá en marcha la Campaña de información y sensibilización a nivel regional y local de recogida de aceites vegetales usados, con charlas en colegios, centros de acción social, asociaciones de amas de casa, de consumidores y usuarios y puntos de información en centros comerciales para fomentar la correcta gestión del aceite usado vegetal de origen domiciliario.
Esta iniciativa responde al cumplimiento del Plan de Residuos Urbanos y de Envases de Castilla y León que establece un modelo de gestión basado en la recogida en origen, mediante el sistema de doble bolsa (envases y resto o materia orgánica y resto), así como contenedores de calle específicos para la recogida de papel, vidrio o envases, recogida selectiva de medicamentos en oficinas de farmacia y, por último, mediante la segregación de residuos domiciliarios especiales y su recogida en puntos limpios o elementos específicos.
La Estrategia Regional de Residuos de Castilla y León también establece entre sus objetivos el desarrollo de acciones tendentes a lograr prioritariamente la reducción en la generación de residuos y la adecuada gestión de los mismos, primando la reutilización, el reciclado y otras formas de valorización de los mismos, con el fin de evitar de este modo su eliminación mediante vertido.
Entre los sistemas de recogida selectiva de residuos urbanos, merece en estos momentos una especial promoción el dedicado a la recogida de aceite usado de origen domiciliario, respecto del cual se han realizado experiencias piloto en algunos municipios de Castilla y León. También existen sistemas de recogida ya más consolidados en algunos municipios de las provincias de Palencia, Salamanca, Segovia y Valladolid, de forma que el objetivo del presente convenio es que se amplíen los niveles de recogida de aceite usado vegetal de origen domiciliario, que en la actualidad se caracteriza por una reducida implantación.
El modelo de recogida de aceite usado de origen domiciliario que se implanta gracias a la firma de este convenio está basado en un sistema consistente en contenedores, bien de calle o en recintos cerrados pero de acceso público (centros comerciales, centros de enseñanza, oficinas municipales, etc.), en los que el usuario deposite el aceite que previamente ha embotellado en su hogar, reutilizando las botellas de plástico vacías. En todo caso los contenedores reunirán las características de resistencia, solidez y estanqueidad adecuadas para cada una de las ubicaciones proyectadas, en especial, aquellos que se coloquen en calle.
El sistema asegura la gestión de todos los componentes, tanto el aceite usado, como las botellas de plástico que lo contienen, y se garantiza el ratio mínimo de un contenedor por cada 2.500 habitantes.
Cada ciudadano consume al año 20,7 kilogramos de aceite vegetal, de los que el 76% es de uso domiciliario, lo que supone un total de 39.000 toneladas al año en Castilla y León. Este volumen genera un residuo estimado en 3,14 kilogramos por persona y año (7.800 toneladas). Actualmente se recuperan en la Comunidad 120 toneladas de aceite vegetal usado de uso doméstico.