San Juan
En la noche del 23 al 24 de junio, Amigos de la Tierra ha realizado una acción para visibilizar el resultado de las fiestas que se celebran en la noche de San Juan para reivindicar las posibles soluciones y así avanzar hacia el residuo cero. Activistas de Amigos de la Tierra han recogido y caracterizado una muestra de los residuos abandonados tras las fiestas en las playas valencianas; un problema derivado del sistema actual de recogida y separación que se muestra insuficiente.
Varias regiones costeras celebran la fiesta de San Juan, donde la gente se reúne en la playa para dar la bienvenida al verano. En esta noche también es tradicional el resultado: una gran cantidad de residuos acumulados en las playas, que de madrugada deben recoger los servicios de limpieza municipales, con el consiguiente coste para las arcas públicas y, por lo tanto, para la ciudadanía.
Con el fin de visibilizar este problema y proponer soluciones encaminadas al residuo cero, Amigos de la Tierra ha participado en diferentes eventos en Galicia, Baleares y en la Comunidad Valenciana.
La Comunidad Valenciana es una de las regiones con más tradición en la celebración de San Juan, por este motivo los y las activistas de Amigos de la Tierra han elegido este lugar. La noche del 23, la asociación ecologista organizó un partido de baloncesto por el residuo cero, en el que encestar latas y botellas de plástico tenía premio.
Para finalizar la jornada, se realizó una recogida y caracterización de los principales residuos abandonados, encontrando que un 21,1% de los mismos eran botellas de plástico, un 28,9% latas y un 17,53% botellas de vidrio. Un total de más del 70% de envases de bebidas. A su vez se encontraron cantidades significativas de vasos, platos y bolsas de plástico.
Con la implantación del Sistema de Depósito que ha anunciado la Consellería de Medio Ambiente de Valencia se podrá reducir el abandono en un 70%, que acompañado de medidas como la prohibición de distribución gratuita de bolsas de plástico, o el fomento de productos reutilizables, mejoraran la protección del entorno, reduciendo los costes municipales y evitando que algunos de estos residuos acaben en el mar.