¿Cuáles son los residuos más complicados de reciclar?
La Semana Europea de la Prevención de Residuos se ha celebrado este año entre los días el 18 al 26 de noviembre. Evitar que un objeto o material se convierta en un residuo al final de su vida pasa por reutilizarlo o bien por reciclarlo. La reutilización no siempre es posible así que en muchos casos el reciclaje es la única opción. Poco a poco el reciclaje va penetrando en los hogares pero no todos los residuos son fácilmente recuperables.
“Más que hablar de residuos difíciles de reciclar, es necesario hablar de productos que cuando se convierten en residuos deben ser tratados para recuperar los materiales que llevan incorporados”, indican el director de la Agència de Residus de Catalunya, Josep Maria Tost. “En general, podríamos decir que la complejidad del reciclaje se sitúa en aquellos productos multimateriales, como los aparatos eléctricos y electrónicos”, señala Tost.
De existir un Top 3 de los productos más difíciles de reciclar, el primer lugar sería para las bolsas de plástico, según un listado elaborado por el Gremi de Recuperació de Catalunya. “El problema con el reciclado de estas bolsas es que muchas veces atascan las máquinas y por lo tanto no son eficientes a la hora de reciclar ya que se debe estar atento a las mismas”, señala el gremio catalán.
Las bolsas de plástico tienen ya los días contados: quedarán prohibidas en España a partir del 1 de enero del 2020. Mientras tanto, suponen un gran problema para el medio ambiente. Sólo el 35% de ellas se deposita en los contenedores amarillos para su reciclaje y, por si solas, tarda hasta 500 años en descomponerse. Además, tienden a dispersarse como basura transportada por el aire y cuando se fragmentan son ingeridas por algunos animales.
El segundo puesto del Top 3 del Gremi de Recuperació de Catalunya es para los pañales. El problema de los pañales viene por partida doble: por un lado, están hechos con varios tipos de plásticos diferentes y, por otro, contienen residuos orgánicos. Hasta ahora la solución pasaba por los pañales lavables de tela, muy ecológicos pero menos prácticos para los padres. Pero a finales de octubre se inauguró en Italia la primera planta industrial de reciclaje de pañales del mundo. La tecnología ha sido desarrollada y patentada por la empresa Fater, una joint venture creada por Procter & Gamble y Gruppo Angelini. La planta recicla también compresas.
Los botes de plástico ponen el colofón final a este particular Top 3 de productos más difíciles de reciclar. “Los botes de plástico, como por ejemplo los de algunos zumo, tienen un problema similar al de los pañales ya que en su interior se encuentran distintos materiales lo que hace que sea prácticamente imposible de separarlos”, señala el Gremi de Recuperació de Catalunya. Los tetra bricks tenían hasta hace poco este mismo problema, al estar compuestos por papel, plástico y aluminio, pero ahora ya es posible reciclarlos.
La clave está en el diseño
El 80% de los impactos ambientales de cualquier producto se pueden evitar en la fase de diseño. Los envases, por ejemplo, pueden causar problemas ambientales como se ha visto en el caso de las bolsas de plástico, por eso es importante diseñarlos desde un principio pensando en su posterior reciclaje. Cada vez más empresas son conscientes de ello y trabajan para incorporar el ecodiseño en su fabricación.
La organización medioambiental Ecoembes trabaja con las compañías envasadoras en el impulso de acciones de ecodiseño. Gracias a estos esfuerzos se ha conseguido, entre otras cosas, que un envase de yogur pese la mitad, que una lata de cerveza sea un 17% más ligera o que una botella de agua incorpore plástico reciclado y de origen renovable. Todo ello facilita una correcta gestión una vez que el envase se convierte en residuo de manera que se pueda reciclar obteniendo una mejora cuantitativa.