GAIA matiza que estos 300 proyectos -incineradoras e instalaciones de gas de vertedero– violan las directrices de la Directiva Marco de Residuos, de la Directiva de Incineración de Residuos y de la de Vertederos. Estudios independientes han demostrado que estas incineradoras e instalaciones de gas de vertedero aumentan las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación, al tiempo que compiten con el reciclaje y el compostaje. Sin embargo, estos proyectos reciben créditos europeos de carbono de los Mecanismos de Desarrollo Limpio (MDL), que luego compran las empresas europeas que optan por no reducir sus propias emisiones.
Según el informe de GAIA, "El doble rasero de la UE en residuos y política climática", los proyectos de residuos peligrosos en el mundo en desarrollo con el apoyo de la UE incluyen:
- Incineradores que carecen de controles adecuados de contaminación. Las regulaciones de la UE requieren controles estrictos sobre las emisiones de las incineradoras de residuos tóxicos, pero el Mecanismo de Desarrollo Limpio no establece límites a la contaminación. Las incineradoras en China aprobadas por el MDL pueden emitir 10 veces más dioxinas mortales que las permitidas en la UE.
- Incineradoras que maximizan, en lugar de minimizar, la quema de materiales reciclables. Al menos 32 incineradoras apoyadas por el MDL queman residuos sin restricciones, a diferencia de Europa, donde la jerarquía de residuos da prioridad a la prevención de residuos, la reutilización y el reciclaje.
- Vertederos que deliberadamente aumentan las emisiones de gases de efecto invernadero con el fin de recibir créditos por la captura de las mismas. Dos tercios de los proyectos de gas de vertedero apoyados por el MDL promueven el enterramiento de los residuos orgánicos para generar más metano y vender créditos de carbono por la captura de las emisiones de metano que de otra forma no se habrían generado. Esto sucede por ejemplo en Concepción (Chile), donde se ha enterrado gran cantidad de materia orgánica para producir metano suficiente que pueda ser quemado con éxito, y la incineradora Changsu (China), que contradice la Directiva Marco de Residuos al no haber prevención de residuos, ni reutilización o ni reciclaje.
La ONG Ecologistas en Acción considera escandaloso que el Reino Unido, Francia, España y los Países Bajos financien estos proyectos y que se permita la compra de créditos de carbono de incineradoras y vertederos que no se permitirían en la UE.
Las conclusiones del informe llegan en un momento importante para la política medioambiental de la UE, que está siendo discutida en preparación de la propuesta del Séptimo Programa de Acción Ambiental (7EAP) para noviembre. El doble rasero de la UE en su política de residuos y clima amenaza con ser una vergüenza para el bloque en el período previo a Río +20, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible en junio, según Ecologistas en Acción.
