El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Iñigo Nagore, que ha comparecido junto al Director General de Calidad Ambiental, José María Infante, ha recordado que cada riojano genera una media de 410 kilogramos de basura al año, y más de una tercera parte –unas 45.000 toneladas– es materia orgánica. Se trata, principalmente, de los restos de comida y jardín que se producen diariamente en cualquier hogar como por ejemplo: peladuras de frutas y verduras, sobras de comida, desperdicios de pescado, huesos y restos de carne, comida en mal estado, pan seco, papel de limpieza, restos de infusiones, césped cortado, pequeña poda, etcétera.
El objetivo de esta iniciativa, según ha explicado Nagore, es consolidar un nuevo sistema de recogida selectiva de materia orgánica independiente del circuito de la basura convencional que se deposita en los contenedores verdes. “Permitirá aprovechar las instalaciones de tratamiento existentes en La Rioja, en concreto en el Ecoparque, donde esta materia orgánica se tratará separada de la fracción resto, de forma que se obtendrán mejores rendimientos en la generación de biogás y de un compost de calidad suficiente para su aprovechamiento en la agricultura”.
Para desarrollar esta experiencia se instalarán progresivamente un total de 103 contenedores de color marrón distribuidos en Galilea (5) y Corera (4) -donde ya están instalados-, Calahorra (se colocarán inicialmente 28 contenedores de gran capacidad en zonas de mayor densidad de población); Pradejón (22), Rincón de Soto (25), Murillo de Río Leza (12) y Alcanadre (7). La elección de estos municipios, que permitirán llegar a 7.760 domicilios y unos 17.000 habitantes, responde a criterios de tamaño de población en una única ruta de recogida hacia el Ecoparque de La Rioja.
Colaboración ciudadana
En la implantación de este nuevo sistema de recogida, la información al ciudadano y la provisión de elementos claves para la recogida jugarán un papel primordial durante todo este verano. Para informar a los ciudadanos sobre el nuevo modelo de recogida y facilitarles la correcta separación de los residuos se han organizado en cada uno de los municipios una serie de sesiones informativas, y también se han situado puntos informativos en lugares estratégicos, donde se entregará una serie de materiales que ayudarán en este nuevo esfuerzo en favor del reciclaje. En determinados casos, un equipo de informadores lo entregará, puerta a puerta, en las viviendas.
El “kit de la orgánica” consta de un pequeño cubo aireado, dos paquetes de bolsas compostables, que facilitan el tratamiento de los restos mejor que las normales, y un imán de nevera. La idea es enseñar a los ciudadanos a separar correctamente la materia orgánica del resto de la basura para que puedan depositarla en los contenedores marrones y se pueda reciclar con menor esfuerzo. Desde estos contenedores, la fracción orgánica será transportada al Ecoparque para compostarla y que pueda volver nuevamente a la tierra convertida en un abono natural.
En este sentido, una mejor salida del compost resultante evitará otro tipo de destinos ambientalmente inadecuados, como el vertedero o incineraciones para los que la Comunidad Autónoma no cuenta con instalaciones propias, por lo que el transporte supondría un encarecimiento del ciclo de gestión de los residuos.
Inversión
La puesta en marcha de este sistema supondrá una inversión de 410.000 euros, cantidad que incluye el uso de vehículos, los contenedores, los cubos, las bolsas biodegradables, y la campaña de comunicación, además de la recogida de residuos durante 18 meses. Este proyecto está financiado por el Gobierno de La Rioja y el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, que aporta un 37% del presupuesto, dentro de las actuaciones enmarcadas en el Plan Nacional Integrado de Residuos para promover actuaciones de interés general, de carácter innovador y que se consideren prioritarias para fomentar cambios en la gestión de residuos. Igualmente, el Consorcio de Aguas y Residuos de La Rioja participa en la gestión y recogida de los residuos.
La nueva Directiva Comunitaria de Residuos exige a los Estados miembro que fomenten la implantación de la recogida selectiva de materia orgánica o biorresiduos, con el objeto de incrementar su reciclado y aprovechamiento. Del mismo modo, la propuesta de Ley de Residuos en España incide en la necesidad de establecer objetivos de recogida selectiva de biorresiduos domiciliarios y, además, sólo permitirá que se denomine compost al material que proceda de recogida selectiva.
La experiencia se completará con el fomento de la recogida de materia orgánica procedente de grandes productores como comedores escolares y residencias, grandes restaurantes, supermercados y mercados.
