Esta estrategia supone un avance espectacular en la lucha contra los residuos plásticos, porque permitirá proteger el medio ambiente de la contaminación de dichos residuos, además de incentivar el crecimiento y la innovación. Es una gran noticia porque lo que ahora supone un gran problema puede transformarse en un programa positivo para el futuro europeo gracias, por ejemplo, al modo de trabajar de las empresas.
En el marco del paquete de la economía circular de 2015, esta estrategia ha sido elaborada por un equipo central del proyecto del vicepresidente primero Frans Timmermans, el vicepresidente Jyrki Katainen y los comisarios Karmenu Vella, Elżbieta Bieńkowska y otros comisarios del sector.
La transformación en las empresas
Si las empresas transforman la forma de diseñar, producir, usar y reciclar los productos europeos, se crearan nuevas oportunidades de inversión y de empleo. El objetivo es proteger el medio ambiente y asentar las bases de una nueva economía del plástico, en la que el diseño y la producción respeten absolutamente las necesidades de reutilización, reparación y reciclaje y se elaboren materiales más sostenibles.
La Comisión Europea adopta, de este modo, un marco de seguimiento formado por un conjunto de diez indicadores que engloban cada fase del ciclo, y servirán para medir los avances de la transición hacia la economía circular en la Unión Europea y a nivel nacional.
Los indicadores clave que hará la Unión Europea:
- Que el reciclaje sea rentable para las empresas.
- Frenar los residuos plásticos.
- Acabará con la basura marina.
- Fomentará la inversión y la innovación.
- Incentivará el cambio en todo el mundo.
- Próximos pasos
Respetando los requisitos para la mejora de la legislación, la Comisión presentará la propuesta sobre los plásticos de un solo uso a lo largo de 2018. Además, la Comisión iniciará el trabajo de revisión de la Directiva relativa a los envases y residuos de envases y preparará pautas sobre la recogida separada y la clasificación de residuos, para su publicación en 2019.