A través de la Estrategia Integral de Residuos 2006-2016, en los dos últimos años se ha reducido un 10% la tasa de residuos urbanos que se genera por habitante, por debajo de la media española y europea. El Gobierno regional va a colaborar con la Asociación para el Reciclaje de Lámparas (Ambilamp) y, para acercar el contenedor al ciudadano, va a crear una red de recogida de estos residuos en ferreterías y tiendas de iluminación.
Contenedores en ferreterías y tiendas de iluminación
Se instalarán contenedores especiales y se proporcionará un servicio gratuito de recogida lámparas de ahorro y fluorescentes a los ciudadanos a través de establecimientos próximos a sus hogares. Ambilamp cuenta con más de 6.000 puntos de recogida en España, de los que 807 se encuentran en la región madrileña. Estos residuos están calificados como peligrosos, ya que los tubos fluorescentes y lámparas de bajo consumo contienen una pequeña cantidad de vapor de mercurio que, cuando se rompen, puede ser liberado y dañar al medio ambiente. Este tipo de bombillas tiene otros compuestos como el vidrio, el metal o el plástico del casquillo que también se pueden reciclar. El 97,5% de los materiales de las lámparas fluorescentes es susceptible de ser reutilizado.
Segunda región en reciclaje de fluorescentes
En 2009 se recogieron y trataron 275.325 kilos de fluorescentes reciclados, el 16% del volumen de España, y en lo que va de 2010 ya se ha recogido un 10,4% más que en el mismo periodo del pasado año. Estos datos convierten a Madrid en la segunda región española que más recicló los residuos de lámparas fluorescentes, por detrás tan sólo de Cataluña.
Las lámparas fluorescentes se enmarcan dentro de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos-electrodomésticos, televisores, equipos informáticos o teléfonos móviles-, cuya recogida se ha duplicado y ha pasado de las 18.000 toneladas a más de 40.000 en los últimos dos años.
Los madrileños también pueden depositar sus fluorescentes y bombillas usados en los 84 Puntos Limpios que la Comunidad ha subvencionado total o parcialmente y que tiene repartidos por la región. El 70% de las localidades de más de 1.000 habitantes cuentan ya con un Punto Limpio para facilitar esa recogida selectiva de materiales voluminosos y sustancias peligrosas que se generan en los hogares.
