Tal y como ha recordado el director general para el Cambio Climático, Jorge Lamparero, "la Autorización Ambiental es el máximo certificado ambiental y por lo tanto garantiza que las técnicas que se emplearán en esta instalación serán las mejores técnicas disponibles, es decir, las menos contaminante que evitarán tanto emisiones como malos olores en la zona".
Según ha manifestado Lamparero "esta planta, junto con la de Caudete de las Fuentes que se construirá próximamente, da respuesta a la planificación prevista en materia de tratamiento de residuos urbanos por el Plan Zonal de Residuos de las Zonas VI, VII y IX. Ambas instalaciones darán servicio a la totalidad de residuos urbanos generados por los más de 200.000 habitantes de estas comarcas".
"Estamos -ha continuado el director general- dando un paso más para dotar a la Comunitat Valenciana de todas las instalaciones contempladas en los planes zonales de residuos".
110.000 toneladas anuales
La planta cuenta con una capacidad máxima de tratamiento de 110.000 toneladas anuales de residuos urbanos y 3.000 toneladas anuales de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos. En esta planta, además de residuos urbanos mezclados, se recibirá la fracción orgánica procedente de recogida selectiva y residuos vegetales de parques y jardines, así como residuos voluminosos y residuos eléctricos y electrónicos.
La planta contará con una nave principal de triaje, una de compostaje y otra de maduración, un centro de almacenamiento temporal y taller, un edificio de recepción y otro destinado a oficinas para el desarrollo de las actividades administrativas de la planta. Además, las instalaciones contarán con un aula ambiental.
El tratamiento de las basuras se inicia con su clasificación tanto manual como automática para recuperar los materiales reciclables presentes. Para ello dispone de sistemas ópticos de selección, separación balística, aspiración de films, separación electromagnética de metales y bricks y separación de fracción planar.
Tras el triaje, a los residuos orgánicos biodegradables separados mecánicamente y, de forma separada, a aquellos residuos orgánicos procedentes de recogida selectiva, se les añade residuos vegetales triturados como material estructurante, pasando al tratamiento biológico de compostaje.
La materia orgánica tanto separada mecánicamente de los residuos como procedente de recogida selectiva es tratada en los 15 túneles de compostaje mediante aireación forzada y alimentación automática, pasando a continuación a la nave de maduración. Tras la maduración, el compost no refinado obtenido es destinado a la otra instalación del plan zonal para su afino y obtención de compost apto para su utilización agronómica.
Reducir las emisiones y evitar la generación de olores
Con objeto de reducir las emisiones a la atmósfera y evitar la generación de olores, la nueva instalación se ha proyectado con la tecnología más avanzada en protección ambiental y tratamiento de residuos. Para ello, los diferentes tratamientos se realizarán en naves cerradas con captación de gases en depresión, pasando al sistema de desodorización compuesto por cuatro biofiltros canalizados con lavadores de gases.
En lo que respecta a la gestión de aguas residuales y lixiviados, esta previsto que efectúe la recirculación de los mismos al proceso de compostaje. También se introducen en el compostaje las aguas residuales sanitarias depuradas. Por otra parte, las aguas pluviales son captadas mediante aljibe y depósito de retención-decantación, utilizándose para usos internos de la instalación o destinándose a gestión externa.
