La clave para conseguirlo radica en dos estrategias: reducir el consumo eléctrico en los hogares (en torno a un 15 o 20%) y ajustar el consumo y la generación eléctrica en los distritos (un 15 o 20%, aproximadamente). Por un lado, el sistema “proporciona a los usuarios información sobre sus consumos, permitiendo identificar los electrodomésticos que más gastan y sugiere posibles soluciones, intentando modificar ciertos comportamientos y fomentando buenas prácticas que permitan reducir la factura eléctrica”, explica el profesor José Ignacio Moreno, del Departamento de Ingeniería Telemática de la UC3M. En este sentido, la plataforma ENERsip permite monitorizar los electrodomésticos mediante redes de sensores y actuadores para controlarlos de manera remota a través de aplicaciones web.
Por otro lado, el sistema que han diseñado lleva a cabo acciones automáticas que permiten ajustar en la medida de lo posible el consumo de los domicilios dentro de un distrito con la generación procedente de fuentes de energía renovable dentro del mismo, reduciendo flujos energéticos y, en consecuencia, pérdidas y costes. “Este tipo de acciones se encuentran enmarcadas dentro de lo que se conoce como gestión de la demanda eléctrica”, indica otro de los investigadores de la UC3M, Gregorio López. Por ejemplo, comenta, se podría aumentar la temperatura unos pocos grados en verano (o reducirla en invierno) en unos cientos o miles de hogares durante un período valle de producción de energía procedente de las fuentes de energía renovables de un distrito o mover la ejecución programada de ciertos electrodomésticos (lavavajillas, lavadoras) a un período en el que haya un pico de generación de energía procedente de estas renovables. “Por supuesto – apunta López – dichos hogares habrían accedido a participar en este tipo de programas por adelantado a cambio de ciertos incentivos y nunca se comprometerían ciertos niveles de confort prestablecidos”.
Redes eléctricas inteligentes y ahorradoras
Las conclusiones de este proyecto, enmarcado en el ámbito de las llamadas Smart Grids (redes eléctricas inteligentes), evidencian que gracias a las acciones automáticas que permiten realizar las TIC se pueden alcanzar ahorros en el consumo eléctrico de hasta un 30%. Para obtener estos resultados, los investigadores han comprobado el funcionamiento del sistema en diversas simulaciones informáticas y han validado la plataforma en un proyecto piloto en tres edificios en diferentes puntos geográficos de Israel. Estas cifras, además, encajan en la senda de otros informes, como el SMART 2020, por ejemplo, que estima que la aplicación de las TIC para la mejora de la eficiencia energética podría traducirse en un ahorro de costes a nivel global de aproximadamente 600.000 millones de euros en el año 2020.
Para hacer funcionar la plataforma ENERsip bastaría con realizar unas instalaciones TIC básicas. En concreto, serían necesarias unas redes de sensores y actuadores para las infraestructuras de consumo y micro-generación, una conexión a Internet y un aplicación web para poder acceder a ella desde cualquier dispositivo conectado a la Web (aunque en el proyecto ENERsip en concreto también se utiliza una infraestructura de comunicaciones troncal dedicada que proporciona ciertos beneficios). “Se podría implementar en cualquier vivienda dotada de la típica infraestructura de consumo o de consumo y de micro-generación”, señala José Ignacio Moreno. El equipo que comanda en la UC3M ha liderado el diseño y modelado formal de la arquitectura de comunicaciones de la plataforma ENERsip, así como las simulaciones software para evaluar el rendimiento de dicha arquitectura de comunicaciones. Además, ha participado en el diseño y definición de las fases y escenarios de integración y validación de la plataforma y ha dado cuenta de los progresos de la investigación a través de artículos técnicos publicados en conferencias de referencia en el ámbito de las comunicaciones, como el INFOCOM 2011 o el ICC 2012.
El consorcio ENERsip, compuesto por una decena de socios de cinco países europeos, está liderado por la compañía española Tecnalia y cuenta con la participación de diversas empresas punteras en su campo, como Amplia Soluciones (España), Honeywell (República Checa), IEC (Israel Electric Corporation, Israel), ISA (Intelligent Sensing Anywhere, Portugal), ISASTUR (Ingeniería y Suministros de Asturias S.A., España), MSIL (Motorola Solutions Israel Ltd, Israel), así como de centros de investigación como el ISR-UC (Institute of Systems and Robotics-University of Coimbra, Portugal), la UC3M (Universidad Carlos III de Madrid, España) y VITO (Vlaamse Instelling voor Technologisch Onderzoek, Bélgica).