Diseñar y fabricar una nueva generación de conectores para tecnologías de alta frecuencia es el principal objetivo de un proyecto de investigación europeo, denominado TERAMeasure y coordinado por la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M). Además de sus aplicaciones en el ámbito de la industria y las telecomunicaciones, esta tecnología puede utilizarse en biomedicina para la detección de cánceres subcutáneos.
Recientemente ha sido necesario recurrir al teletrabajo de forma generalizada, aumentado la cantidad de información transmitida por nuestras redes inalámbricas. Esta sobrecarga de datos puede provocar un colapso de datos y una posible solución es recurrir a frecuencias de transmisión cada vez más altas, donde existe capacidad para ello.
“Hay mucho ancho de banda disponible en la banda de ondas milimétricas, es como si hubiese carreteras que no se están utilizando cuando en otras hay atasco”, explica el coordinador de TERAMeasure, Guillermo Carpintero, catedrático del Departamento de Tecnología Electrónica de la UC3M.
“El mayor reto que afronta la comunidad científica es cómo generar estas frecuencias y las enormes limitaciones de los cables y conectores usados actualmente. Con TERAmeasure, esperamos revolucionar la tecnología de alta frecuencia desarrollando unos conectores que sirvan desde 30 GHz hasta 3000 GHz”, destaca el profesor Carpintero. Para ello, se combinará la fotónica integrada con silicio micro-estructurado para desarrollar una nueva tecnología de interconexión de banda ancha y sin contacto.
“La característica de que no requiera contacto físico es fundamental, pues en alta frecuencia el tamaño de los conectores se reduce hasta unos cientos de micras (similar al diámetro de la raíz en el cuero cabelludo), haciéndolos muy frágiles. Y al no existir contacto en nuestra solución, se protegen los conectores y evitamos que las interconexiones afecten a las señales que se transmiten a través de ellos”.
Conectores y aplicaciones disruptivas
Estas tecnologías de alta frecuencia se pueden utilizar para investigar las propiedades de los tejidos y de los materiales. Por ejemplo, al excitar las moléculas mediante determinadas frecuencias con espectroscopía, estas “resuenan” y es posible identificar sus componentes, explican los investigadores.
De hecho, en el marco de este proyecto, se investigarán las propiedades de la piel para buscar cáncer a nivel subcutáneo en colaboración con un grupo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), con el objetivo de desarrollar sensores que permitan realizar un seguimiento de las quemaduras de los pacientes.
Otro ámbito de aplicación que se va a explorar en el marco del proyecto es el control de calidad de fabricación de circuitos integrados en silicio, que necesitan estas frecuencias tan altas para aumentar la resolución de las imágenes en las que se detectan los fallos de fabricación.
TERAMeasure, presentado recientemente en un webinar sobre fotónica de microondas organizado por el Consorcio Industrial Europeo de Fotónica (EPIC, por sus siglas en inglés), forma parte de programa FET (Future and Emerging Technologies) Open, una modalidad de proyectos científicos del Programa Marco de Investigación e Innovación de la Unión Europea (UE) Horizonte 2020 ligados a la creación de nuevas tecnologías rupturistas y caracterizados por estar basados en un enfoque interdisciplinar y con la participación de empresas de alta tecnología.
Artículo de referencia: https://www.dicyt.com/noticias/nuevos-conectores-para-la-industria-de-alta-frecuencia,